Cultura

El Gobierno rechaza, otra vez, el regreso de 'La Dama de Elche' a la Comunidad Valenciana … ¿Por qué?

El debate sobre dónde debe estar la pieza se eterniza. Mientras los ilicitanos piden su devolución, el Gobierno se resiste

Está ubicada en la primera planta del Museo Arqueológico Nacional, en una amplia urna de cristal sobre un gran tapiz liso de tono cobrizo. Y de ahí no se moverá. Se trata de La dama de Elche, la emblemática pieza íbera de piedra caliza, de los siglos V-IV a.C, una de las piezas históricas de mayor relevancia y que desde años es objeto de disputas entre la Comunidad Valenciana y el gobierno central, que volvió a dar carpetazo a la petición de devolver la escultura a la ciudad donde fue hallada.

El gobierno central, que volvió a dar carpetazo a la petición de devolver la escultura a la ciudad donde fue hallada

El pasado 2 de enero el alcalde ilicitano, el socialista Carlos González, quien gobierna el apoyo de Compromís y el Partido de Elche, señaló que en este 2017 comenzaría el trabajo de la comisión mixta formada por Generalitat-Ayuntamiento para instar al Gobierno central a la futura ubicación del busto íbero en el Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE).  Poco ha tardado el Ejecutivo en contestar: por "razones de índole histórica, de titularidad y de función cultural" la pieza debe permanecer en el Museo Arqueológico Nacional (MAN), en Madrid.

El debate sobre dónde debe estar La dama de Elche se eterniza. Mientras los ilicitanos piden su devolución, el Gobierno se resiste. "El Museo Arqueológico Nacional como museo estatal, cumple un papel de representación de los pueblos y culturas que han trazado la historia de España a lo largo del tiempo", así cierran cualquier negociación para la cesión de la valiosa pieza íbera.

La larga historia de una mujer de más de 2.000 años

No se supo de su existencia hasta el 4 de agosto de 1897.Fue hallada en los terrenos en la Loma de la Alcudia, junto a Elche. La consiguió Manuel Campello, que entonces tenía 14 años, quien llevaba buena parte del día trabajando la tierra con un grupo de campesinos. Justo cuando los agricultores descansaban bajo una higuera, él se entretenía dando golpes a un ribazo con un azadón. Uno de esos tantos golpes impactó contra algo duro. Era La dama de Elche. La noticia del hallazgo se difundió pronto. En aquellos días, visitaba Elche el hispanista y arqueólogo francés Pierre Paris, quien envió una fotografía al Musée du Louvre, recomendando la compra inmediata de la obra. No tardaron ni quince días. Consiguieron el mecenazgo del banquero Noël Bardac y firmaron la compra de la pieza el 18 de agosto. Doce días después, el busto  partía para embarcarse en Alicante y, tras una escala en Barcelona, llegaría a Marsella. La parada final era el Louvre.

Cuando fue hallada, el francés Pierre Paris envió una fotografía al Musée du Louvre, recomendando la compra inmediata de la obra. No tardaron ni quince días en hacerse con ella

Ya bautizada en París como Dama de Elche, se convirtió en el centro de una campaña periodística y científica. La Generación del 98 volcó en ella una personificación de los orígenes de España: subrayaban su pérdida como un verdadero despojo. Treinta años después, en 1928 se planteó la devolución de la pieza a España, por lo menos a la Casa de Velázquez, institución cultural francesa instalada en Madrid. Pero el Gobierno francés se negó y volvió a dilatar las conversaciones. Hubo que esperar a 1940 para que, con posterioridad a la derrota de Francia por Alemania, comenzaran los trámites definitivos de repatriación a través de un intercambio de obras que incluía, por supuesto, la escultura íbera.

Hubo que esperar a 1940 para que, con posterioridad a la derrota de Francia por Alemania, comenzaran los trámites definitivos de repatriación

Fue decisiva la intervención del marqués de Lozoya, entonces director general de Bellas Artes, para que La Dama, que permanecía protegida en el castillo de Montauban desde el comienzo de la guerra, llegara a Irún el 8 de febrero de 1941. Unos días después fue llevada al museo del Prado y en 1971 fue trasladada al Museo Arqueológico Nacional, como obra en depósito.

Una fascinación que capturó hasta Himmler

Cuando el jefe de las SS alemanas, Heinrich Himmler, visitó Madrid, dedicó largo tiempo a contemplar La Dama de Elche. En aquella España ya gobernada por Franco, quien desde 1938 se encontraba al frente del país tras ganar la Guerra Civil, la visita de un alto cargo del Tercer Reich fue objeto de cualquier cantidad de reseñas, incluyendo fotografías donde puede verse a Himmler fascinado ante el busto de piedra . Según la Hemeroteca del diario ABC, la visita ocurre el 22 de octubre de 1940.Sin embargo, resulta curioso pues para esa fecha, la escultura no se hallaba todavía en España. Llegó seis meses después.

EL itinerario de la Dama de Elche ha sido largo y complicado. En1965 volvió a tierras ilicitanas con motivo del séptimo centenario del Misterio de Elche. Cuarenta años después, la Ministra de Cultura Carmen Calvo decidió cederla temporalmente a su ciudad de origen. El 18 de mayo de 2006, La Dama de Elche presidió la inauguración del Museo Arqueológico y de Historia de Elche. El gesto reabrió una vieja herida, ya que los habitantes reclamaban la vuelta definitiva de la escultura a su lugar de origen. Sin embargo, el resultado es siempre el mismo: la pieza regresa a los museos estatales, en este caso, el Museo Arqueológico Nacional, que la exhibe junto con damas de Galera, Ibiza y Baza, esta última representación de una aristócrata de la ciudad de Basti (Baza, Granada) del siglo IV a. C.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli