Jorge Sanz empezó a trabajar como actor cuando apenas tenía nueve años a las órdenes de Pedro Masó para su película La miel (1979) y más tarde participó en Conan el bárbaro (1982), dirigida por John Milius y protagonizada por Arnold Schwarzenneger. Ha aparecido en títulos de cineastas como Fernando Trueba, Vicente Aranda, Emilio Martínez Lázaro o Gonzalo Suárez, y esta semana llega a la gran pantalla con Por tus muertos, una película dirigida por Sayago Ayuso y protagonizada por José Mota que acaba de presentarse en el Festival de Málaga.
Con motivo del estreno de esta comedia en los cines, en la que interpreta al batería de un grupo de rock que regresa años después de su éxito, el actor ha conversado con Vozpópuli en una céntrica cafetería de Madrid sobre su papel en este proyecto, su vida diez años después del infarto que sufrió en 2014, la amistad en el cine y el estado de la profesión en España.
Pregunta: Por tus muertos apela a la nostalgia y lanza una mirada al pasado. ¿Echa algo de menos de otras épocas?
Respuesta: En realidad no. Siempre me he considerado, por oficio, un tipo que ha sabido adaptarse a los tiempos que han llegado, y creo que cualquier tiempo futuro va a ser mejor siempre, porque tienes el poso de lo que has vivido, te has quedado con lo bueno del pasado, pero sigues adaptándote, progresando y creciendo. Temas como el feminismo nos están haciendo ser mejores personas y nos están haciendo crecer. Todo cambio siempre me ha parecido positivo. Lo positivo del pasado sigue conmigo y he descartado lo que no es positivo.
P: Interpreta a Valen, un hombre que vive atento a la épica y sin tener en cuenta las consecuencias que sus actos tienen en el futuro ¿cómo es él?
R: El personaje raro de la película. Es el que tiene más comedia y es de estos personajes que estaban muy bien escritos. Es la tercera vez que el director me pregunta cómo voy a hacer el personaje y le digo que voy a hacer exactamente lo que dice el guion. Era un personaje bombón que cae encima pocas veces. Esta película muestra cómo la vida ha tratado a unos tipos que en la movida fueron famosos y dónde les ha colocado la vida 30 años después y en qué le ha convertido a cada uno.
"He conocido personajes que con 50 años siguen viviendo como cuando tenían 20, aunque no hacen daño a nadie, y he intentado sacar lo mejor de todos"Jorge Sanz, actor
P: Al margen de interpretar su papel tal cual aparece en el guion, ¿cómo ha empatizado con este personaje?
R: He conocido a personajes como Valen, que han decidido vivir la vida de una manera muy especial, pero que no tienen ninguna atadura ni han engañado a nadie. Son como son porque así lo han decidido, con lo autodestructivo que puede ser eso, pero tampoco engañan a nadie. He conocido la movida y los personajes de la farándula, que ha ido de la mano siempre con la música. He conocido personajes que con 50 años siguen viviendo como cuando tenían 20, aunque no hacen daño a nadie, y he intentado sacar lo mejor de todos. En cualquier caso, este personaje podría no existir y ser alguien onírico a quien imagina José Mota.
P: La película destila mucha comedia y mucha amistad. Más allá de lo que transmiten los padres, los amigos son una figura importante en la vida, como se ve en la película.
R: Son fundamentales. Tengo pocos amigos pero que cultivo desde los seis años. La familia y los amigos de verdad son dos de las tres patas de mi vida. En este caso, Valen tiene esa amistad incondicional y esa lealtad que a mí me gusta cultivar también.
P: ¿Cree que ha cumplido sus objetivos en la profesión?
R: Espero que me quede la segunda parte del partido. Estoy muy agradecido y muy satisfecho, tengo una trayectoria muy larga que sigo manteniendo y he cumplido muchas etapas que he aprovechado y he exprimido al máximo. Ser actor me ha permitido ir por la vida de una manera única. He disfrutado cada momento en mi vida de una manera excepcional, y la he disfrutado. Casi acaba conmigo pero he conseguido superarlo. El éxito como actor es tener una carrera larga con todos los antibajos que son los que no te visten. El éxito es permanecer en el tiempo.
P: ¿Cómo le cambió el infarto que sufrió hace diez años y cómo afectó a su carrera?
R: Como actor, la mayoría de las veces no los promueves. Yo nunca he tenido un objetivo en mi carrera, no he decidido hacer un tipo de personajes. He ido creciendo y adonde me han llevado mis personajes, mis películas y mi vida, que era lo más importante. Para ser actor, cuantas más cosas te pasen en la vida, mejor. Pasan las vivencias y tú las muestras a la gente, y de la manera en la que tú las transmitas conseguirás que la gente piense más o menos. Me han preguntado qué es lo que diría a un actor que empieza en la profesión y la respuesta es esa, que viva la vida todo lo que pueda.
Jorge Sanz y el espejismo de la profesión
P: Existe siempre una imagen de glamour en torno a la profesión de la interpretación, especialmente del cine, que no existe en la medicina o en la fontanería.
R: Hasta que llega un médico y te salva la vida, o llega un bombero y te saca del fuego y te da una vida nueva. A veces el glamour no lo ves, pero está en cosas más cotidianas.
P: ¿Puede ser que el brillo de la profesión del actor llegue a opacar la vida, la vulnerabilidad? Recientemente, AISGE presentó un estudio que pone de relieve que siete de cada diez actores están por debajo de la línea de la pobreza, y esto choca bastante con la imagen que se proyecta en los medios.
R. Y si te dedicas a seguir a un actor y leer las entrevistas que hace y las cosas que dice ya se te cae mucho más el mito. No conviene mostrarse mucho. Creo que forma parte del oficio, porque la gente no quiere ver desgracias en según qué oficios, todo el mundo tiene su vida dura y sus obstáculos, para que encima te venga alguien con más obstáculos.
"Todos tenemos facturas, familias, nuestras durezas, nuestras dificultades, como todos, pero la gente piensa que vivimos en una alfombra roja"Jorge Sanz, actor
P: Entonces se da una falsa imagen.
R: Pero este mundo es falso por definición. Todos tenemos facturas, familias, nuestras durezas, nuestras dificultades, como todos, pero la gente piensa que vivimos en una alfombra roja y yo creo que no.
P: Entre sus mejores amigos en la profesión, uno piensa en David Trueba. Él dirigió una miniserie sobre la vida de un actor venido a menos que protagonizaba, y participa también en su último proyecto, El hombre bueno, que se presenta estos días en el Festival de Málaga.
R: David y yo somos amigos desde los 16 años. Nos conocimos en el rodaje de El año de las luces (1986) y luego en el de Belle époque fue cuando realmente nos hicimos amigos de verdad. Hemos viajado, hemos trabajado, hemos recogido un Oscar juntos, hemos estado arriba y abajo. Hemos tenido juntos una vida muy intensa. Este es un oficio vocacional que se puede hacer con dinero o sin dinero y que lo único que hace falta es juntar a gente como él, con talento, que tenga la necesidad de contar una historia. Eso siempre ha existido.
Sin_Perdon
Un gran actor injustamente poco reconocido. Yo, siendo adolescente, lo ví en "Valentina", una película llena de amor, recuerdos, ternura,.... muy nostálgica. Algo impensable en estos tiempos convulsos donde la mayoría de las producciones son auténtica basura. Desde entonces, siendo ya tan precoz, ha tenido una carrera larga y sostenida. Lástima que en este país no se valore lo bueno que tenemos. Por otro lado, esa imagen glamourosa que los ciudadanos tenemos de la gente de la farándula está provocada por ellos mismos, solo hay que ver las galas que se montan en las que la discreción y la sencillez ni están ni se las espera y donde últimamente triunfa lo chabacano, lo estridente y el mal gusto. Si trasladas una imagen falsa luego no te quejes de que la gente sea con lo que se queda.