Hay muertos que están muy vivos. En España seguimos sin reconocer la inmensa talla artística de Juan Gabriel, pero su trayectoria post mortem es la de un auténtica leyenda de la música popular. Sigue triunfando con sus discos de duetos con grandes estrellas actuales, su música es cada vez más celebrada por los oyentes y sus compañeros de profesión se han volcado con las versiones de sus clásicos. Le recordaron Coldplay en sus conciertos mexicanos con “Amor eterno”, Maná arrasaron haciendo suya “Se me olvidó otra vez” y también tuvo el honor póstumo de una versión de artistas tan diversos como el reguetonero Justin Quiles, el flamenco Diego el Cigala y la cantautora mexicana Silvana Estrada, entre otros.
La última gran noticia es que Netflix ha anunciado una serie sobre el Divo de Juárez, que lleva el sencillo título de Juan Gabriel, el documental. La azarosa vida del artista, salido de las capas sociales más bajas de México, será filmada por la directora María José Cuevas, reconocida por su trabajo en Bellas de noche, sobre las actrices clásicas del cine para adultos de los años ochenta en el país azteca. “Es un honor ser parte de la aventura de contar la historia del Divo de Juárez”, compartió la directora en su cuenta de Twitter.
“Estamos muy emocionados por esta colaboración con Netflix, junto con María José Cuevas y Mezcla, para lanzar el documental sobre la vida personal y la carrera musical de mi padre. Desde hace bastante tiempo hemos querido llevar a la pantalla una adaptación de su historia real. Estamos seguros de que podremos trabajar cercanamente con el equipo que hemos formado para darle vida a su verdadera historia”, ha comentado Iván Aguilera, hijo de Juan Gabriel.
Juan Gabriel, artista nacional mexicano
Aparte de sus méritos musicales, Juan Gabriel tiene otros de carácter sociológico, por ejemplo reavivar el imaginario de la cultura popular mexicana o desfiar al durísimo machismo del país. Consiguió convertirse en icono nacional a pesar de ser gay, jugando hábilmente con la ambigüedad. Cuando los medios le insistieron en que definiese su sexualidad, contestó con la célebre frase “Lo que se ve no se pregunta”. Más de 700.000 personas pasaron en 2016 por su capilla ardiente en el Teatro de Bellas Artes, templo de la capital donde grabó su concierto más recordado. La audiencia de la emisión de su funeral fue de 11,8 millones, situándose entre los más seguidos de la historia.
Juan Gabriel puede ha muerto, pero su legado sigue todavía muy vivo entre sus oyentes y la comunidad internacional de musicos
Netflix promete que la serie desvelará imágenes inéditas de la vida de Alberto Aguilera Valadez, nombre real del cantautor. Está previsto que el rodaje se haga entre México y Estados Unidos, tan pronto como sea posible. No hay todavía fecha oficial de estreno, pero hay un intenso plan de trabajo para intentar debutar en 2024. Las productoras son dos mujeres: Laura Woldenberg e Ivonne Gutiérrez, que la trabajaron con Cuevas en el alabado documental Las tres muertes de Marisela Escobedo, que narra la odisea de una madre para esclarecer el asesinato de su hija, enmarcado en el feminicidio mexicano. También se estrenó en Netflix.
¿La última anécdota de lo vivo que sigue Juan Gabriel? Hace unas semanas se hizo viral el vídeo de Harper Beckham, hija de David y de Victoria, haciendo burritos mientras bailaba el clásico “No tengo dinero” del artista mexicano (sin duda la canción que menos se ajusta al estatus económico de la familia). La ‘spice’ pija compartió el vídeo en TikTok donde la niña bailaba este himno al lado de su padre, mientras ambo cocinaban. “Bailamos salsa”, dijo David, metiendo la pata hasta el fondo. Tampoco vamos a afearle el error: lo importante es la contribución a mantener vivo el legado de uno de los artistas populares más talentosos que ha cantado en nuestro idioma.
