El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha apostado hoy por mantener el precio fijo del libro y se ha comprometido a seguir negociando en la Unión Europea para conseguir la equiparación del IVA del libro en papel y el electrónico.
Así lo ha señalado en la inauguración del Encuentro de la Edición "Pancho Pérez González" de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, donde también ha recordado que el Gobierno trabaja en una nueva Ley de Propiedad Intelectual, aunque no ha querido "comprometer un plazo específico", y ha abogado por un "nuevo paradigma" para el sector basado en la internacionalización y las nuevas tecnologías.
El ministro ha trasladado a los editores que mantener el precio fijo del libro es una medida "esencial" para preservar la diversidad del sector editorial y también para el último eslabón de la cadena antes del lector, que es el librero.
En cuanto a la equiparación del IVA, ha reconocido que se trata de un asunto "complicado" y que requiere de una negociación en el marco de la Unión Europea. "Haciendo un esfuerzo de convicción en algún momento de este siglo tiene que dar resultado", ha apostillado.
Wert ha hecho hincapié en que el compromiso del Gobierno en la defensa de la propiedad intelectual y de los creadores es "completamente firme" y ha explicado que, con la nueva regulación, se quiere desarrollar un marco que dé seguridad jurídica y protección a los creadores y encontrar respuestas que den satisfacción a todos: creadores, editores, distribuidores y lectores.
"Es una norma complicada y no quiero comprometer un plazo específico", ha dicho Wert, quien ha destacado que el Gobierno ha demostrado, desde su primer Consejo de MinistroS, su preocupación por la protección de la propiedad intelectual, a través de "este nuevo instrumento legislativo y de algún otro parcial".
El ministro ha destacado el esfuerzo que se está haciendo junto al sector editorial para "ponerle coto" a la piratería del libro digital que "tanto daño hace".
A su juicio, la oferta del libro electrónico tiene que ser una de las bases de desarrollo del sector en unos momentos en los que se están transformando todos los elementos de la cadena de valor del libro y es necesario avanzar hacia "un nuevo paradigma".
Un nuevo modelo que debe tener como ejes la modernización y la internacionalización, según el ministro, quien ha apuntado que esa será la tarea que marcará la línea de apoyo al libro.
En su opinión, el sector tiene que apostar por el largo plazo, por una consolidación de su presencia en el mercado latinoamericano y especialmente en el sector educativo, el de los libros de texto.
Wert ha dicho a los editores que el suyo es un sector que evoluciona aprisa y cualquier retraso en ese proceso de adaptación a los nuevos tiempos "implica un riesgo muy importante". Y, citando "Alicia en el país de las maravillas", les ha invitado "a correr dos veces más aprisa".
El presidente de los editores españoles, Javier Cortés, cree que este es un sector que no renuncia a su historia pero no quiere quedarse en el pasado y está dispuesto a afrontar nuevos retos.
Ha subrayado además que ha sido un elemento fundamental para construir una cultura de convivencia en España, por un lado, y por otro se ha convertido en la quinta industria editorial del mundo. Según Cortés, como agentes culturales "de primer orden", los editores quieren hacer también sus aportaciones en las reformas que emprenda el Gobierno tanto en el ámbito cultural como educativo.
