El próximo viernes 26 de de mayo arranca la 76ª Feria del Libro de Madrid. Durante dos semanas, más de trescientas casetas, entre editoriales, librerías e instituciones, recibirán a los lectores, que este año llegan al embudo de la primavera con las novedades literarias represadas. Desde los libros publicados a comienzo de año, como el regreso de Enrique Vila Matas en Seix Barral o lo nuevo de Coetzee publicado por Literatura Random House, hasta la irrupción de autores como la surcoreana Han Kang. Hay mucho qué leer y poco tiempo disponible.
Hay mucho qué leer y poco tiempo disponible. Aquí una selección de lo mejor y, sobre todo, la mención del que pensamos será el libro de la Feria...
Como cada año, Vozpópuli propone una bitácora de ficción que permita a quienes así lo deseen abrirse paso en el bosque editorial que habitará el parque del Retiro hasta el día 11 de junio. El recorrido incluye 30 libros, divididos en dos grandes grupos: las apuestas de los sellos independientes y de las grandes editoriales, además de un apartado especial para reediciones, inéditos y recuperaciones así como el repaso a los más leídos de la temporada. A ello se suma el que pensamos será el libro de la Feria, que no es otro que el regreso de Ray Loriga en su mayúscula novela Rendención, ganadora del Premio Alfaguara 2017.
Lo que traen los sellos independientes
Comienza la ruta de la 76 Feria del Libro de Madrid por los sellos independientes. Libros del Asteroide se abre paso con La uruguaya, del escritor argentino Pedro Mairal (Buenos Aires, 1970), una novela irónica que se adentra en la crisis de los cuarenta, con una perspectiva mordaz. A esa se suma un título que sin ser estricta novedad, conviene buscar: Tiene que ser aquí, la última novela de Maggie O’Farrell, considerada uno los libros del año en Reino Unido. El sello Rata, cuyo sobrio catálogo se consolida a pesar de la juventud de la editorial, figura con La vegetariana, la novela ganadora del Man Booker Prize con la que la escritora surcoreana Han Kang propone un alegato sobre la desconexión voluntaria que establece una joven mujer, Yeonghye, con la vida y consigo misma. La protagonista llevará a tal punto su decisión de no comer carne –e incluso de no volver probar abocado nada jamás- que transforma su postura vital en un trastorno alimenticio y psicológico. La lucha contra la depredación se vuelve en su contra, aniquilándola por completo. Una novela que nada tiene que ver con el animalismo, sino con el malestar de la sociedad contemporánea en su relación con la vida, la muerte y el bienestar.
Entre las apuestas literarias de los pequeños y medianos sellos resalta un libro que pega fuerte desde hace ya meses: Canción dulce (Cabaret Voltaire), de Leila Slimiani -esta semana, por cierto, la autora visita Madrid-, un libro que tiene a muchos lectores y libreros deslumbrados. Ganadora del Premio Goncourt 2016, en las páginas de esta novela Leila Slimani narra la historia de Myryam, madre de dos niños que decide retomar su actividad laboral en un bufete de abogados, un punto de partida que aprovecha la autora para desplegar un thriller que revela los problemas de la sociedad actual: su concepción del amor, la educación y la libertad. De Errata Naturae resulta obligatorio buscar dos libros. Uno de ellos ya ha sido mencionado en estas páginas: Regreso a Berlín, de Verna B. Carleton, una novela que ofrece una visión del Berlín de finales de los años cincuenta. El lector encontrará –aseguran sus editores- una mirada inédita y poderosa tan personal y potente como la de Angelika Schrobsdorff en su Tú no eres como las otras madres, el bestseller independiente de la feria pasada. A ese se suma Agua salada, de Charles Simmons, un autor que muchos han comparado J.D Salinger, por la escasez y brillantez de su obra. Según sus editores, en este libro Simmons propone una revisión de la novela corta de Turguénev, Primer amor, y aporta momentos de belleza y genialidad de un Nabokov.
Entre las apuestas literarias de los pequeños y medianos sellos resalta un libro que pega fuerte desde hace ya meses: Canción dulce (Cabaret Voltaire)
A estos libros se suma uno, publicado ya hace unos meses por la editorial Periférica, pero que merece la pena rescatar, entre otras cosas porque es perfecto. Se trata de Manual del exilio, del escritor y soldado desertor, Velibor Colic. En sus páginas, Colic narra su propia travesía al llegar a Francia como un soldado desertor del Ejército Popular Yugoslavo, en el que había sido enrolado en contra de su voluntad, en 1991. En este libro habla un hombre sin idioma, sin identidad, sin hogar y que sólo posee una certeza: su propia vocación literaria. Aunque no podría decirse que este libro es sólo eso, hay mucho más en esa ecuación inicial: brutalidad, poesía, amargura, aspereza y redención.
Este mes Páginas de Espuma publica 'La vaga ambición', con el que Antonio ortuño ganó el V Premio Ribera del Duero
Resulta necesario hacer un aparte dentro del capítulo ficción para dedicarlo al relato, un género en el que la editorial Páginas de Espuma concentra el grueso de su catálogo y que en esta feria tiene ya novedad anunciada: La vaga ambición, el libro de relatos con el que el mexicano Antonio Ortuño ganó el V Premio Ribera del Duero, prestigioso galardón con el que han sido reconocidos escritores como Marcos Giralt Torrente o la mexicana Guadalupe Nettel. En La vaga ambición Ortuño crea un principio de unidad que permite que los relatos sean leídos como parte de un conjunto. Protagonizados por el escritor Arturo Murray, cada uno de los seis cuentos teje -con humor e ironía- temas comunes: la literatura como resistencia; la decadencia familiar y editorial o las penurias económicas del autor.
Lo mejor de los grandes sellos
Son muchas las novedades literarias de los grandes grupos editoriales. Hasta tal punto, que acaparan más de la mitad de la oferta. Tan sólo en lo que a ficción refiere, han llegado a las librerías alrededor de una docena de títulos que merecen atención: desde Jean Echenoz con Enviada especial (Anagrama); La esposa joven, de Baricco (Anagrama) o la ya mencionada Los días de Jesús en la escuela (Literatura Random House), del Premio Nobel J.M Coetzee, hasta autores como David Trueba con Tierra de campos (Anagrama); Marta Sanz con Clavícula (Anagrama) o Antonio Orejudo con Los cinco y yo (Tusquets). Uno de los libros más jugosos de esa camada es Clavícula, de Marta Sanz. Puede considerarse como el más autobiográfico y militante de los libros de la escritora. En sus páginas, mientras cuenta la angustia que desata en ella la sospecha de tener una enfermedad, Sanz compone un libro complejo, sustancioso, en el que carga contra la retórica de la resiliencia. Defiende el derecho a no soportar el propio dolor y por tanto a quejarse. El derecho a ser frágil. A temer.
Pero hay más. Ignacio Martínez de Pisón y su potentísima Derecho natural (Seix Barral), una entrega que llega justo después de La buena reputación (Premio Nacional de Narrativa) y en la que el escritor aragonés levanta una historia colectiva a través de la vida de una familia. Ambientada entre 1969 y 1989, Derecho natural transcurre en el espacio histórico de La Transición. Contada en primera persona por Ángel, el hijo mayor de un clan desastroso y desestructurado, el libro arroja luz sobre cómo la gente corriente, el resto de España, vivió aquellos años. Seres que viven una época de cambio: una España en la que la democracia desembarca, en la que las leyes están por escribirse y en la que todo puede ir –o no- a mejor. Llena de ironía, humor y ternura, esta supone sin duda al mejor Pisón, que vuelve a superarse.
Publicada en marzo de este año, toca recuperar El Monarca de las sombras (Literatura Random), de Javier Cercas. La novela llega en el 16 aniversario de Soldados de Salamina (Tusquets), una historia que colocó a Cercas en el mapa literario contemporánea español. Así como en aquella novela Javier Cercas narraba y recomponía la historia de Miralles, el miliciano que perdona la vida al escritor e ideólogo de la Falange Rafael Sánchez Mazas, ahora el escritor asume otro punto de vista dentro de la Guerra Civil. En esta ocasión, recompone la historia de su tío abuelo: el falangista Manuel Mena, alférez del ejército franquista que murió en el Ebro, con apenas 19 años. Una novela con el sello Cercas y en la que plantea un dilema moral que hace escala en la lectura colectiva de España.
Recién salida del horno, toca mencionar también Recordarán tu nombre (Destino), una novela sin ficción en la que Lorenzo Silva relata la vida del general José Aranguren Roldán (1875-1939), la máxima autoridad de la Guardia Civil en Cataluña y quien se negó participar en el golpe de Estado contra la República en 1936. Sometido a un cruento proceso por los nacionales, quienes lo fusilaron ese mismo año, Aranguren sirve a Lorenzo Silva para ilustrar la soledad y el olvido al que son sometidos aquellos que se quedaron en el medio de los dos bandos. Aporta Lorenzo Silva un elemento adicional: la coincidencia de sus abuelos, Lorenzo y Manuel, con el héroe de esta historia , un pasadizo personal que abre la puerta a un libro envolvente, un retrato personal y colectivo.
En otra coordenada temática, Gabi Martínez y Lorenzo Luengo son dos escritores que destacan en este semestre por la calidad literaria de sus novelas, ambas publicadas por el sello Seix Barral. Gabi Martínez es uno de los libros que más se repite en las recomendaciones de libreros y lectores con Las defensas, una novela basada en la historia real de un médico que sufrió la enfermedad que investigaba y movilizó a la comunidad médica para demostrarlo. Considerado al comienzo como un loco, el personaje empuja su historia en una primera persona que Gabi Martínez construye con solidez pero sin moralismos ni reproches. Dota a su héroe de la sustancia de la que está hecho y en la que avanza con la fuerza de un combate. En otro registro pero ejecutada con una perfección de martillo, está Lorenzo Luengo con El dios de nuestro tiempo, una novela que explora el mal a través de la desaparición aparentemente inconexa de tres adolescentes y con la que levanta una historia tan aterradora y oscura como hermosa en su prosa. Un libro duro que defiende su crudeza con destreza y talento literario.
El dios de nuestro tiempo, de Lorenzo Luengo: un libro duro que defiende su crudeza con destreza y talento literario.
También áspero, pero bello y perfecto en su ejecución, está Orfancia (Destino), la primera novela del italiano Athos Zontini, una novela que parece una cosa pero deviene en otra. Ambientada en Nápoles, en la época actual –aunque no resulta sustantivo saber dónde ocurre- Orfancia está narrada en primera persona por un niño que ha decidido dejar de comer. Está convencido de que si engorda, de que si alcanza el peso óptimo, sus padres lo degollarán para devorarlo. Por eso lucha con todas sus fuerzas contra ese instinto de alimentarse, que poco a poco se abre paso en su vida como una fuerza irrefrenable. En ese doblez entre detener la vida y sobrellevar la que se rebela en su interior, este pequeño y enclenque muchachito experimentará un raro y creciente placer: infringir dolor en otros le abrirá todavía más el apetito. Y es allí cuando estará perdido, cuando no podrá dar marcha atrás. Un relato sobre el alimento, sobre el hecho de crecer y la aspereza de los afectos familiares. Otra joya para buscar en las casetas de la feria.
El Alfaguara de Loriga, el libro que hay que leer
Para el final hemos dejado el que, sin duda, es el mejor Premio Alfaguara de Novela en años. Redención, de Ray Loriga, el autor mítico de los noventa que se reinventa en su mejor versión. Ganadora del concurso de novela convocado por el sello capitaneado por Pilar Reyes, Redención transcurre en un clima de guerra y pérdida, de soledad y desesperación. El resultado es fascinante. Este libro supera con creces a las mejores entregas del escritor. En sus páginas hay algo de la historia de Saúl Trífero, un errabundo viudo de una patinadora muerta en un lago congelado. Algo conecta aquel espíritu con el del narrador de Rendición: un hombre cuyos hijos luchan en una guerra y que adopta junto a su mujer a un niño refugiado, a quien ve crecer mientras su casa se cae a pedazos y están a punto de ser evacuados a otra ciudad.
"Esta novela está tejida con un estambre que parece venir de la hebra de Los oficiales y El destino de Cordelia, literatura pura y dura en manos de un escritor que ha procurado madurar"
Esta novela está tejida con un estambre que parece venir de la hebra de Los oficiales y El destino de Cordelia, literatura pura y dura en manos de un escritor que ha procurado madurar, así sea a base de colapsos, pero que hoy se presenta ante el lector como una voz sólida, al fin adulta, siempre aquejada por una soledad que lleva pegada a las suelas de los zapatos y a los puntos seguidos de sus párrafos. Es, sin duda, de las novelas literarias que pega más fuerte y en la que Ray Loriga se alza, al fin, como el púgil vencedor ante sí mismo.
Recuperaciones
Quince años después del último volumen recopilatorio de relatos del escritor catalán Juan Marsé, el sello Lumen ofrece a los lectores una selección revisada por el propio autor y a la que se añade un texto inédito. Se trata de Colección particular, que incluye nueve piezas que han marcado el viaje del escritor a lo largo de los años: de Historias de detectives a Noticias felices en aviones de papel, sin olvidar Teniente Bravo o La liga roja en el muslo moreno. Estos relatos están acompañados por un prólogo de Ignacio Echevarría que arroja luz sobre los textos periodísticos incluidos, en los que se rastrean lugares y personajes que luego aparecerán en las novelas más importantes del escritor catalán. A estos se suma, por último, un texto inédito que cierra el volumen y abre nuevas puertas a la lectura de un maestro.
Otro autor de peso que celebra aniversario es Javier Marías. Su séptima novela, Corazón tan blanco, cumple 25 años. Aquel título, inspirado en la frase que pronuncia Lady Macbeth en el segundo acto de la tragedia de Shakespeare, sirvió a Marías para levantar su propia tragedia. Ese doblez diabólico que surge entre los hombres y las mujeres, pero desde otro lugar: el de las razones que irrigan una muerte y que desmontan la larga cadena de omisiones y reblandecimientos, de crueldades e hilos que explican el suicidio de un ser frágil y hermoso que se dispara en el corazón. La novela está narrada por Juan Ranz. Traductor e intérprete de profesión, un hombre recién casado, que se enfrenta a una muerte devastadora, cuya descripción está considerada como uno de los mejores arranques de la novela española escrita en el siglo XX. En ocasión del aniversario, Alfaguara publica una edición encofrada que reúne dos volúmenes: uno con textos del propio Javier Marías (incluida una carta de Juan Benet sobre la novela) y de la crítica -la novela ha sido traducida a 44 idiomas-, así como la novela.
No es posible salir de la Feria del Libro sin al menos haber visto la edición especial que publica Literatura Random House de Cien años de soledad, la novela más conocida del Nobel colombiano Gabriel García Márquez y que este 2017 cumple 50 años. El volumen tiene ilustraciones a cargo de la artista chilena Luisa Rivera así como una tipografía creada por el hijo del autor, Gonzalo García Barcha. En Cien años de soledad, Gabriel García Márquez abre ante nuestros ojos todo un mundo al que convendría acercarse -o regresar- teniendo en cuenta algunas lecturas. Una de ellas, la edición que diez años atrás -en ocasión del 40 aniversario del libro- publicó la Real Academia Española. Entre los estudios que la acompañan conviene resaltar dos: Lo que sé de Gabriel, de Álvaro Mutis y Para darle nombre a América, de Carlos Fuentes.