Paquita Salas es sin duda y a nivel nacional uno de los fenómenos de Netflix. El pasado viernes se estrenó su tercera temporada en la plataforma. Seis capítulos ágiles y de corta duración -poco más de media hora- que antojan ver la ficción de forma maratoniana.
Y ahora, es, en términos de ficción, lo que centra buena parte de la conversación en las redes. Aunque si hay algo que haya destacado de la nueva entrega de la serie de Los Javis ha sido el regreso a la pequeña pantalla de Anna Allen. Algo que, por cierto, muchos ya consideran historia de la televisión.
La actriz desapareció de la vida pública después de que saliera a la luz que se había inventado una carrera en Hollywood. Una argucia que llevó a cabo gracias al Photoshop.
Ocurrió a principios de 2015, cuando el diario El Mundo, destapó que la imagen que la propia Allen había distribuido de ella misma en los Oscar era un montaje. Tras esto, el portal Fórmula TV, publicó más fotografías manipuladas por la actriz.
Tras esto, la actriz desapareció de la vida pública, borró -lo que pudo- su rastro de Internet y redes sociales. y no se volvió a saber de ella... hasta ahora.
Cuidado, 'spoilers'
Y si todavía no has visto entera la tercera temporada de Paquita Salas, será mejor que dejes de leer, ya que el artículo contiene spoilers a continuación.
En la serie de Los Javis, Allen da vida a un personaje llamado Clara, que interpreta Claudia Traisac, una actriz que desapareció misteriosamente tras descubrirse unas fotos manipuladas en la alfombra roja de los Oscar.
En un ejercicio de metaficción dentro de la trama de la serie, esa historia acaba siendo llevada al cine en una película que dirige Belén de Lucas (Anna Castillo) y la actriz elegida para el papel resulta ser la propia Allen, que pronuncia un monólogo de arrepentimiento en el que admite su error.
"Sí, todo era mentira"
"Vamos a dar la cara", dice al empezar su discurso. "Sí, todo era mentira. Las ofertas de trabajo, los guiones, todos los papeles... Ahora he destruido mi carrera, que tanto me costó construir".
A medida que se va sucediendo el monólogo, un primer plano se centra en una emocionada Anna Allen, quien parece estar saliendo de la ficción, para pedir disculpas en la vida real.
"Así que dime, qué hago ahora. Qué harías tú en mi lugar. Ya nadie responde al teléfono cuando llamo. Se han olvidado de que soy una buena actriz. No sé hacer otra cosa", dice.
Y termina: "La pregunta importante es qué voy hacer a partir de ahora. Voy a salir, voy a luchar, voy a salir adelante. Voy a coger todo lo que me ha pasado y a convertirlo en algo que merezca la pena".