Y un año después apareció el manuscrito. Ese fue el tiempo que tardó la Policía Nacional en dar con el Códice Calixtino del siglo XII custodiado en el archivo de la Catedral de Santiago de Compostela, el cual fue recuperado ayer al mediodía en Milladoiro (La Coruña).
El manuscrito, que permanecía desaparecido desde el 5 de julio del año pasado, fue hallado en un garaje que pertenecía al electricista José Manuel Fernández Castiñeiras, principal investigado en el caso, arrestado junto a su esposa, su hijo y otra mujer vinculada a la familia.
Según informó la Policía Nacional, el libro estaba escondido en el interior de varias bolsas de plástico, empaquetado con papel de periódico a unos metros de la vivienda habitual de la familia.
En el mismo garaje se encontraron otros dos facsímiles del Códice y también dos libros que podrían proceder de la catedral de Santiago. El hallazgo se produjo tras el registro efectuado en un garaje del número 23 de la calle Rosalía de Castro de Milladoiro ( La Coruña), donde el detenido residía con su familia.
Además del manuscrito, la Policía incautó un millón doscientos mil euros, un valioso Libro de Horas medieval, correspondencia de los canónigos y llaves de acceso a diferentes lugares de la Catedral en la que Castiñeiras había trabajado durante más de 25 años como electricista autónomo y a la que continuaba teniendo acceso a pesar de haber sido despedido.
Los hallazgos se produjeron tras los cuatro registros practicados ayer en domicilios, garajes y trasteros de Santiago, O Milladoiro (donde hoy apareció el Códice), Negreira (La Coruña) y en Grove (Pontevedra). Según fuentes de la policía, un millón de euros se encontraban distribuidos entre las viviendas (contiguas) de José Manuel Fernández Castiñeiras y de su hijo Jesús Fernández Nieto, mientras que los 200.000 restantes estaban escondidos en una vivienda, también propiedad de Castiñeiras, en Ogrove.
El electricista, quien intentó desvincular a la su familia de los hechos al afirmar que estos desconocían sus actividades, había escondido en su residencia de Milladoiro una parte del dinero en un pequeño habitáculo tipo armario protegido por una cortinilla. La policía consiguió euros y dólares de muy bajo valor facial: 1,2 y 10 dólares, así como otros de 10,20, 50 y en menor cantidad de 200 euros.
Hipótesis policiales sostienen que una cantidad de ese tipo no puede proceder de un adelanto o venta parcial del Códice, sino de la venta de distintos objetos que de José Manuel Fernández Castiñeiras podría haber sustraído de la catedral.
Continúan las investigaciones. De momento, además de José Manuel Fernández Castiñeiras y de su hijo Jesús Fernández Nieto permanecen detenidos María Remedios Nieto Mayo, esposa del electricista, además de María Jesús Quinteiro Seoane, supuesta novia de Jesús Fernández Nieto.