Por Prince Rogers Nelson no me viene nada. Al famoso enano de Minneapolis se le conocía de muchas maneras, pero sólo los seguidores más avezados relacionan a Prince Rogers Nelson con el autor de canciones míticas de la historia de la música, como Purple rain o Kiss (la versión de Tom Jones también está a gran altura)
Al final de la rosa sólo queda su nombre. Por eso el cantante, como si fuera el poeta portugués Fernando Pessoa, se escondía en distintos seudónimos que sin embargo no ocultaban su talento. Fue primero Prince. Así triunfó en todo el planeta. Entre 1993 y 2000 usó también un símbolo impronunciable. De hecho, muchos le empezaron a llamar “El símbolo”.
Y en otra pirueta nominal, acuñada entre su genio y la admiración de sus fans, Prince dejó de ser Prince para ser conocido como "El artista antes conocido como Prince", "TAFKAP" en abreviatura. “El artista” fue otro de sus sobrenombres. Fue uno y muchos al tiempo. Y al final sólo queda su música.