Las entidades de gestión de derechos de autor se oponen a la aprobación del anteproyecto de reforma de la Ley de Propiedad Intelectual. El anuncio fue hecho antes de que se pospusiera la discusión del documento en el Consejo de Ministros de este viernes para el de la semana siguiente: 23 de marzo.
Agedi, Aie, Aisge, Cedro, Dama, Egeda, Sgae y Vegap han recriminado en una carta enviada al ministro José Ignacio Wert el anuncio de la las modificaciones a la ley, por considerar que se ha llevado a cabo “de espaldas al mundo de la cultura y con ausencia absoluta de diálogo”.
“Acogimos muy positivamente el ofrecimiento realizado por usted permitiéndonos participar, desde el diálogo y la cooperación”. Sin embargo asumen que la presentación del texto sin haber sido objeto de discusión "no se corresponde con el sentimiento de cooperación que en dicha reunión nos expresó”.
Dos de los aspectos que más preocupa a los representantes de los derechos de los creadores son el hecho de que el anteproyecto confirma el nuevo sistema de copia privada (cuya cuantía es fijada y abonada a ejercicio vencido y se fija cada año en los Presupuestos Generales del Estado), así como la inclusión de medidas de control de las entidades de gestión de derechos de propiedad intelectual que vulneran la normativa europea en la materia.
"Solicitamos formalmente que se paralice la tramitación del anteproyecto de ley hasta la formalización del grupo de trabajo comprometido por usted en nuestra última reunión"
Denuncian además la cesión de atribuciones en la gestión colectiva de los derechos a la Comisión Nacional de la Competencia, que podría intervenir en las funciones de control y determinación de las tarifas, un asunto que, según sostienen las entidades, debe recaer en la Comisión de Propiedad Intelectual, todavía en situación demasiado precaria para asumir ese papel de acuerdo con las previsiones del gobierno. “No es bueno que un órgano aborde desde fuera de la ley un rediseño de la ley”, zanjaron.
“La reforma de la actual Ley de Propiedad Intelectual que hemos conocido de forma extraoficial, parece esconder la falta de una política activa para la creación e implementación de una industria cultural robusta”, insisten antes de solicitar que se detenga su aprobación: "En nombre de más de un millón de titulares de derechos, le solicitamos formalmente que se paralice la tramitación del anteproyecto de ley hasta la formalización del grupo de trabajo comprometido por usted en nuestra última reunión. Es imprescindible que la futura Ley recoja también los criterios y aspiraciones de los titulares de derechos”.