Cuarenta lotes fueron concedidos durante una subasta vibrante por un total de 26.658.250 dólares. De esta forma Sotheby’s superó la marca que estableciera Christie’s el pasado año para una colección de arte hispanoamericano. La superó durante menos de una hora, que fue el tiempo que necesitó la casa de apuestas para retirar nueve millones de dólares de las cifras oficiales.
La cantidad pagada por las obras superó con creces el precio mínimo confidencial que establece el consignatorio
Tanto la pieza estrella de la subasta, el primer mural de Diego Rivera que haya salido a subasta, como la icónica Naturaleza Muerta de Rufino Tamayo y otros, se toparon con la cláusula número 8, la famosa reserva secreta o precio mínimo confidencial que establece el consignatario, y que en este caso podemos atestiguar que fue superior a los cinco millones y medio y los dos millones y medio por los que se concedieron respectivamente las obras a golpe de martillo. Seis obras retractadas entre cuarenta piezas únicas que Lorenzo H. Zambrano reunió meticulosamente durante una vida y que están igualmente destinadas a dispersarse.
¿Cómo surgió el imperio de CEMEX?
Lorenzo Hormisdas Zambrano Treviño tomó una empresa cementera de mediano tamaño y la dejó convertida en el tercer emporio global del cemento. Siempre al abrigo del poder, mantuvo estrechas relaciones con la cúpula política nacional, y con las élites económicas internacionales, por lo que no era extraño oírle repetir los mantras retórico políticos del momento. No en balde, Enrique Peña Nieto apenas dos semanas después de ser proclamado presidente, el 17 de diciembre de 2012, le perdonó a CEMEX el 80% de su exorbitante deuda con la hacienda pública.
Desde que Lorenzo Zambrano ejerciera de promotor financiero para la campaña electoral del presidente Carlos Salinas Gortari -en aquella “dictadura perfecta” del PRI de la que célebremente hablara Vargas Llosa- en cuyo sexenio se produjo la meteórica expansión de CEMEX, que la convirtió en el monopolio mexicano que ha sido desde entonces; pasando por sus estrechas relaciones con los presidentes panistas Fox y Calderón durante las que ésta continuó por Tailandia, Puerto Rico, Reino Unido y Australia y que llevarían a CEMEX a los 21.000 millones de dólares de deuda en 2009; hasta su jubiloso reencuentro con el PRI de Enrique Peña Nieto: mucho ha tenido que cambiar todo para que todo siga igual.
Su dedicación y su presencia creativa a lo largo de los años se hicieron legendarias
Es bien cierto sin embargo que la viveza de su dedicación y su presencia creativa a lo largo de los años se hicieron legendarias. Encontró su prueba de fuego en la planta de Torreón. La dirección de la compañía le asignó la peor planta con la que contaban, remota calurosa y deficitaria. El joven Lorenzo de 1968 hizo virtud de la adversidad y empleando lo que llegaría a conocerse como el “CEMEX way”, elevó la productividad mediante una gestión enérgica, mejorando un detalle ínfimo de cada vez, hasta que al pasar tan solo dos años la planta se había transformado en la más eficiente de México. Este hito le granjeó el reconocimiento del Consejo y puso la primera piedra de un estilo de dirección que le acabaría llevando a la dirección de la compañía dieciséis arduos años después.
El pasado 12 de mayo murió Lorenzo Zambrano en el hotel Villa Magna de Madrid cuando le esperaban reunidos sus abogados a cuenta de la sanción por fraude fiscal que tantas dimisiones y despidos ha acarreado a la Agencia Tributaria tal y como Voz Pópuli ha venido informando. Su muerte dejó sillas vacías en la dirección de CEMEX, en el Consejo de Administración de IBM y de la Comisión Trilateral, en el Consejo Asesor de Citigroup y de la escuela de negocios de Stanford; y una colección de arte que guardaba celosamente en su casa de Monterrey y por la que su hermana Nina confiesa que mostraba devoción.
Una colección de arte majestuosa
La disposición de los cuadros en esta majestuosa casa de la regiomontana colonia de Joya del Venado puede revelar algunas de las claves de la subasta. En la parte privada de la casa, a la que él podía acceder discretamente, por más gente que transitara la casa, hay un salón rojo anaranjado de algo más de cien metros cuadrados, decorado con muebles de robustas maderas vetadas, en que acostumbraba a leer. Una de sus paredes exhibía a la vez el mural Río Juchitán de Diego Ribera, Hacia la Torre de Remedios Varo y The Temptations of St. Anthony de Leonora Carrington. Los protagonistas de la subasta reunidos en un golpe de vista. Los tres recibieron largas y competidas pujas pero fue un Remedios Varo la venta más alta, y la única que superara en casi un millón de dólares la estimación más optimista de la casa de subastas más antigua del mundo.
Los detalles del cuadro son minuciosos pero no dificulta una sensación de limpieza en su composición
La experiencia de este cuadro es imposible de fotografiar. Así como los colores de Tamayo o Ciqueiros se reproducen bien en distintos formatos, este es un cuadro imposible. La cualidad metálica de sus óleos refleja la luz en haces afilados e independientes como sus mismos trazos. El detalle es del todo minucioso pero no dificulta una sensación general de limpieza en su orden compositivo. Es el primer episodio de un tríptico que representa el rito de paso de la niñez a la madurez femenina. Las jóvenes, protegidas y cercada por los pájaros que vuelan, participan hipnóticamente del movimiento liviano que conduce su ordenada rutina. El fulgor intenso de todos los ojos humanos nos dice que el argumento no está más allá sino más adentro, especialmente en aquellos que trazan una dirección nueva.
Este óleo sobre tabla fue separado hace tiempo de sus dos hermanas, como lo fue el pasado lunes del resto de cuadros de la colección. Y aun a mucho más llega la separación según declaraciones exclusivas de Axel Stein, vicepresidente de Sotheby’s y jefe del departamento de arte iberoamericano para Voz Pópuli. Stein afirmó que el arte de Lorenzo Zambrano no es lo único que saldrá a subasta, pues su extensa biblioteca, su colección de relojes, de vinos, y de bólidos antiguos, e incluso sus muebles, se irán. Quizá no sea de extrañar que el hombre que introdujo CEMEX a cincuenta países y que contribuyó tanto a un mundo global se haya dispersado por todo él tan eficazmente.