Si todavía buscas disfrutar de la conducción y hacerlo con grandes dosis de seguridad, sin duda que estos dos deportivos en formato compacto son una combinación casi perfecta para ello, con motores que rondan los 400 CV pero que hacen la vida fácil con sus cambios automáticos y la eficacia de sus sistemas de tracción total.
No llegan a ser deportivos radicales, pero a cambio puedes llegar a rodar casi tan rápido con mayores dosis de seguridad y confianza y utilizarlos en el día a día con unos niveles de confort más que razonables, incluso en largos viajes.
Audi RS3 Sportback
Es la apuesta más deportiva de Audi en el segmento, un modelo que cuya personalidad se encuentra sobre todo bajo el capó en forma de una poderosa mecánica de una configuración poco habitual como es este bloque de cinco cilindros en línea que desarrolla 400 CV de potencia y un par máximo de 500 Nm. Cifras que no sólo se traducen en prestaciones de infarto, sino también en una entrega muy aprovechable y una respuesta muy llena y progresiva.
Respecto a un A3 normal tiene 4 centímetros más de anchura y 25 milímetros menos de altura, con la curiosidad de que en el eje delantero calza neumáticos de mayor medida que en el trasero, 265/30 y 245/35 respectivamente, en ambos casos con llantas de 19 pulgadas.
El brillante cinco cilindros de 2,5 litros de cilindrada gestiona la potencia sobre el asfalto a través del sistema de tracción total al que al tradicional diferencial Haldex trasero, que reparte la tracción entre ambos trenes, se le añaden dos embragues multidisco controlados electrónicamente para cada una de las ruedas traseras, con lo que el control del par que llega a cada rueda es mucho mayor que se traduce en una notable eficacia al aplicar sobre el asfalto todo el potencial.
El motor ofrece una respuesta muy intensa cuando se solicita rápidas aceleraciones pero con una curva de potencia muy llena a bajo régimen facilita mucho la conducción al no tener que estar tan pendientes del régimen de giro. Responde con mucha intensidad desde muy abajo y empuja con decisión hasta su límite de corte de encendido.
Dispone de varios modos de conducción y, en el más eficiente, la caja de cambios desacopla los embragues para dejar el coche en circulación "a vela" cuando llaneamos permitiendo ajustar algo los consumos que, en una utilización normal a ritmo tranquilo, puede estar incluso por debajo de los 8 l/100 km. Eso sí, a poco que aprovechemos parte de su potencia, te mueves en medias que rondan los 10-11 litros, sobre todo cuando activamos los modos más deportivos.
Una de sus grandes virtudes es la facilidad de conducción, casi tan poco exigente como el M240i y con reacciones en general muy progresivas, siempre desde una agilidad brillante para moverse entre curvas a ritmo vertiginoso. La capacidad de tracción a la salida de la curva en plena fase de aceleración es uno de sus puntos fuertes, y sus reacciones muy controlables incluso si nos atrevemos a prescindir de los sistemas electrónicos de ayudas a la conducción.
Todo a sus mandos resulta sencillo y transmite mucha confianza en todo momento, sin llegar a asustar sus 400 CV que permite moverte en trazados virados con mucha naturalidad. Frena con altísima eficacia, en este sentido algo mejor que el M240i, entra en curva sintiendo que tenemos todo bajo control y sale de ella catapultado hacia la próxima sin perder la trayectoria.
Y como su rival de BMW, resulta suficientemente confortable a la hora de cubrir largas distancias, con suspensiones que filtran de forma más progresiva y una contenida rumorosidad en el interior. Un compacto deportivo con el que puedes manejarte a diario con naturalidad y con el que los viajes resultan toda una experiencia.
FICHA TÉCNICA:
VERSIÓN RS3 Sportback quattro S tronic; MOTOR Gasolina, 5 cilindros, turbo; CILINDRADA 2.480 cm3; POTENCIA MÁXIMA 400 CV a 7.000 rpm; PAR MÁXIMO 500 Nm a 2.250 rpm; CAMBIO Automático doble embrague de 7 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 250 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 3,8 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 8,3 l/100 km; AUTONOMÍA 660 km; DIMENSIONES 4.389 / 1.851 / 1.436 mm; NEUMÁTICOS 265/30 y 245/35 R 19; PESO 1.645 kg; MALETERO 282 l; PRECIO 79.060 €
BMW M240i
Aunque tiene por encima al M2 de 400 CV, el M240i es una alternativa más razonable para quienes no busquen la radicalidad de aquél con su tracción trasera y su cambio manual, dos elementos cada vez más difícil de ver ya en el mercado y que permiten sin duda sentir una conducción más "plena", pero requiere de buenas manos para poder sacarle todo el partido.
Como en el RS3, este M240i es más "fácil" de disfrutar a muy alto ritmo, menos exigente y con apenas 26 CV menos sus prestaciones no defraudan ni mucho menos, con una respuesta de su poderoso motor de seis cilindros que mantiene su intensidad desde bajo régimen hasta rozar las 7.000 rpm, una respuesta quizás algo más progresiva todavía que la del RS3 y algo más "dulce" cuando se moverse a ritmo tranquilo se refiere.
Con un cambio de ocho relaciones, hay que recurrir más a él a través de las levas del volante o dejar hacer al modo automático Sport para sentir el enorme empuje a medida que sube de vueltas, sin llegar tan arriba como el cinco cilindros del RS3 pero con una intensidad que invita a hacerle girar a muy alto régimen para disfrutar del sonido que emite a medida que coge vueltas y de unas prestaciones acordes a sus 374 CV.
A diferencia del Audi, la definición de su bastidor le da una mayor relevencia al tren trasero, que se deja sentir en fuertes aceleraciones en mayor medida que el RS3, aunque lo hace de una manera más controlable que, junto a una amortiguación firme pero algo menos que en aquél, hace la conducción algo menos exigente en el proceso de frenar, entrar en curva, mantener la trazada y salir acelerando a fondo.
Un proceso muy fluido que te permite ritmos muy vivos en trazados virados con una menor exigencia al volante que en el RS3. Sus consumos en este tipo de conducción pasan a un segundo plano, pero si de viajar se trata, algo que hace el M240i con un razonable grado de confort, te mueves por encima de los 8 l/100 km.
FICHA TÉCNICA:
VERSIÓN M240i xDrive Coupé; MOTOR Gasolina, 6 cilindros, turbo; CILINDRADA 2.998 cm3; POTENCIA MÁXIMA 374 CV a 6.500 rpm; PAR MÁXIMO 500 Nm a 1.850 rpm; CAMBIO Automático de 8 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 250 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 4,3 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 8,7 l/100 km; AUTONOMÍA 590 km; DIMENSIONES 4.548 / 1.838 / 1.404 mm; NEUMÁTICOS 255/35 R 19; PESO 1.765 kg; MALETERO 390 l; PRECIO 73.050 €