La patronal del sector de la motocicleta, Anesdor, ha dado a conocer los datos correspondientes al cierre del año 2023, un sector que registró en este pasado ejercicio muy buenos resultados, los mejores desde el año 2008 cuando se comercializaron 309.710 unidades. En total, el año pasado se matricularon un total de 225.440 motocicletas y ciclomotores, lo que supone un 11,4% más que en 2022.
Estas cifras sitúan al sector en una cuota de penetración en la automoción del 16,6%, un dato que ha crecido cinco puntos en los últimos cinco años. Las motocicletas son las que mejores datos obtuvieron con 199.210 matriculaciones, un 13,4% más que en el último ejercicio.
Por cilindradas, las motocicletas de más de 750 centímetros cúbicos son las que mayor crecimiento porcentual experimentaron (+24,1%), seguidas de las de la cilindrada de 125 a 750 centímetros cúbicos (+18,2%), siendo las motocicletas de hasta 125 las de menor crecimiento (+11,1%).
Por segmentos, el scooter, con 110.467 unidades y un crecimiento del 14,3%, continúa siendo el tipo de motocicleta más demandado por los españoles, copando un 55,5% del total de las ventas. El canal particular es el dominante, con un total de 169.178 unidades, casi un 85% del total.
Los ciclomotores registraron una caída del 6,54%, con un total de apenas 14.701 unidades vendidas, un segmento que en España llegó a registrar ventas por encima de las 300.000 unidades dos décadas atrás. El resto de vehículos de la categoría L cerraron en positivo el ejercicio, siendo los modelos de tres ruedas los que mayor crecimiento registraron (+13,3%) con 3.986 unidades.
Con estos datos, el parque total de motos y vehículos ligeros en nuestro país ya asciende a 5.978.888 vehículos. Eso sí, la edad media sigue aumentando y se sitúa ya en los 17,4 años. Respecto a la moto y el vehículo ligero eléctrico, 2023 fue el primer año (exceptuando 2020 por la pandemia) en el que se registraron datos negativos, con una caída del 13% y un total de 14.930 unidades, el 6,6% sobre el total del mercado.
Preocupación por las medidas de la DGT
Por otro lado, ventas al margen, las cifras de siniestralidad siempre han preocupado al sector, y más en este último ejercicio 2023 que han subido de manera notable, casi un 20% más de fallecidos respecto al año anterior. Prueba de ello es el compromiso y la inversión que las empresas realizan para implementar nuevas tecnologías y automatismos en los nuevos vehículos; así como las diferentes propuestas en materia de seguridad que Anesdor ha presentado en numerosas ocasiones a la DGT.
Dentro del paquete de medidas propuestas por el ministro Grande-Marlaska, la eliminación de la equivalencia del carné de coche B con el A1 de motocicleta es la más preocupante. Desde el sector se considera ineficaz, y además conlleva impactos importantes no solo para el sector de la moto, sino para la sociedad en su conjunto, pues perjudicaría severamente la nueva movilidad.
Para José María Riaño, secretario general de Anesdor, “2023 ha cerrado con los mejores datos desde el año 2008. Una buena noticia no solo para el sector sino para la movilidad en nuestro país por todas las ventajas que aporta la moto. Y empezamos 2024 preocupados con las medidas anunciadas por el ministro de interior. Somos los primeros interesados en reducir la siniestralidad, pero creemos que algunas de estas medidas no ayudarán a mejorar y sí perjudicarán a la economía y a la nueva movilidad. Las motos, ni son bicis, ni son coches, tienen singularidad y requieren una atención particular”.