A solo 45 minutos de Madrid se levanta la histórica localidad de Alcalá de Henares, conocida, entre otras muchas cosas, por ser cuna del inmortal Miguel de Cervantes. Con más de 2.000 años de historia y declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1998, Alcalá es un destino ideal para disfrutar de la historia, la cultura y la gastronomía.
Conocida como “ciudad del saber”, fue la primera urbe diseñada y construida especialmente como sede de una universidad. Fundada por el cardenal Cisneros en 1499, la Universidad de Alcalá de Henares sirvió como modelo a otros centros de enseñanza en Europa y América, y ha destacado siempre por sus grandes aportaciones al idioma español.
Casa de Hippolytus. ©Ayto Alcala de Henares_Comunidad de Madrid.
Sin duda la mejor forma de conocer Alcalá es perdiéndose por sus calles y rincones, repletos de historia y de lugares de interés. Lugares como la Plaza de Cervantes, el Palacio Arzobispal, el Museo Arqueológico y Paleontológico de la Comunidad de Madrid, la Casa de Hippolytus o las ruinas romanas de Complutum, uno de los enclaves romanos de referencia en España.
De la época renacentista destacan el edificio de la Universidad de Alcalá, con su patio trilingüe, o el Corral de Comedias, que ofrece visitas guiadas además de una cuidada oferta teatral. De este periodo es también la recreación de una típica casa toledana de la época en el Museo Casa Natal de Cervantes. Su interior alberga una Biblioteca y el Museo Cervantino, que contiene multitud de objetos de época.
Casa Cervantes. (CC)Flickr_Comunidad de Madrid.
Gastronomía cervantina
Pero, al margen de este impresionante patrimonio histórico y cultural, hay un atractivo de Alcalá de Henares que ningún visitante debe pasar por alto: su gastronomía. Y es que su amplísima oferta combina la comida castellana tradicional con las últimas tendencias de la cocina de vanguardia e internacional, haciendo de esta localidad uno de los destinos gastronómicos más atractivos de la Comunidad de Madrid
La amplísima oferta gastronómica de Alcalá de Henares combina la comida castellana tradicional con las últimas tendencias de la cocina de vanguardia e internacional
En sus numerosos y excelentes restaurantes se pueden encontrar los mejores exponentes de platos castellanos tradicionales, desde la clásica sopa de ajo, hasta las migas con chorizo, los callos a la madrileña o el cordero o el cochinillo al horno. Pero también una pujante oferta de cocina de creativa gracias a la llegada de un ramillete de jóvenes chefs que exploran los nuevos caminos de las técnicas culinarias más modernas y la fusión de estilos y sabores a partir de ingredientes de excelente calidad.
La fusión de estilos es rasgo distintivo de la gastronomía alcalaína. ©MASanchez_Comunidad de Madrid.
Además, a lo largo de todo el año se organizan en Alcalá jornadas gastronómicas que permiten degustar platos típicos de la cocina castellana con guiños culinarios a los platos que se mencionan en “El Quijote”, como los Duelos y Quebrantos. La Semana Gastronómica de febrero, la popular Ruta de las Tapas o las Jornadas Gastronómicas Cervantinas, celebradas en torno a las fiestas conmemorativas del nacimiento de Miguel de Cervantes, convierten Alcalá de Henares en el referente de la cocina del Siglo de Oro.
Hostería del Estudiante
Ubicada en un lugar emblemático: el antiguo colegio mayor de San Jerónimo, con vistas al Patio Trilingüe de la Universidad de Alcalá, y justo en frente del Parador Nacional de Alcalá de Henares, la Hostería del Estudiante es heredera de la tradición universitaria complutense. Sus amplios salones están decorados con la vitola del siglo XVI, con enormes vigas de madera y una chimenea donde ya se cocinaba hace cinco siglos. Junto a sus platos clásicos y tradicionales de la cocina madrileña, su carta recoge referencias al recetario cervantino y las especialidades regionales más emblemáticas de la cocina de los diferentes Paradores.
Hostería del Estudiante. ©MASanchez_Comunidad de Madrid.
Restaurante Ki-Jote
Las referencias a Don Quijote en la gastronomía de la ciudad cervantina son constantes, incluso en un restaurante especializado en cocina japonesa y de fusión como Ki-Jote. Abierto desde el año 2015, este establecimiento regentado por el chef Oskar Reguilón y el metre y sumiller Pedro V. Chica permite disfrutar de los sabores clásicos de la comida nipona y la fusión con la comida mediterránea en un ambiente acogedor y relajado.
Con una filosofía basada en ingredientes frescos y de calidad, la carta y sushi bar de Ki-Jote ofrece ‘mil y una maneras’ de darle un bocado a Japón. Desde sus diferentes menús de degustación hasta alternativas vegetarianas, cocina apta para celiacos, tapas y otras sugerencias para quienes en lugar de comer o cenar prefieran disfrutar de la experiencia del sushi bar en la sala o en la terraza del restaurante.
Casino Alcalá
Ubicado en un edificio emblemático del casco histórico, este restaurante fusiona la buena gastronomía, la decoración y el ambiente para convertir la visita en una experiencia única para comer en Alcalá de Henares. Su propuesta incluye recetas de toda la vida bañadas en una atractiva combinación entre técnica y sabores de siempre. Cocina de temporada, elaborada con productos de proximidad y en la que marca la pauta la calidad del producto.
Casino Alcalá. ©BELEN-IMAZ_Comunidad de Madrid.
Ambigú
Ubicado junto al teatro Cervantes, este restaurante de corte moderno, informal y ambiente cálido y acogedor destaca por una buena materia prima excelentemente ejecutada. Con una propuesta joven, fresca y desenfadada, su cocina viajera recoge recetas de diferentes partes del mundo bajo una premisa irrenunciable: intentar buscar siempre el equilibrio para fusionar lo mejor de cada país y sin perder la esencia de los sabores de siempre.
Cultura de tapas
Alcalá de Henares es uno de los mejores lugares de España para tapear. Y es que comer o cenar de tapas y raciones es una costumbre muy arraigada en la cultura local y que se convierte en una autentica celebración gastronómica en los bares y restaurantes de su casco histórico.
La variedad es uno de los rasgos distintivos del tapeo en esta localidad. Desde las clásicas patatas bravas, tortilla de patatas o calamares a la andaluza, hasta alternativas más elaboradas y autóctonas las como las migas a la alcalaína, con su toque de uvas tan distintivo, las opciones son tan amplias como deliciosas.
Repostería
La repostería de Alcalá de Henares merece una mención especial. Y es que la costrada, un pastel de merengue, crema y hojaldre, o las almendras garrapiñadas de las Clarisas de San Diego son conocidas en toda España. Y lo mismo ocurre con las célebres rosquillas de Alcalá, cuyos orígenes se remontan al Siglo XVI. Las más famosas, las “listas”, con el característico color amarillo que les da su recubrimiento de almíbar o merengue.
Las célebres almendras garrapiñadas de las Clarisas de San Diego. @SARA-PANIAGUA_Comunidad de Madrid.
En definitiva, Alcalá de Henares ofrece una rica y completa oferta de experiencias al visitante, que puede disfrutar a través de sus numerosas visitas turísticas guiadas y completar con el estimulante viaje en el Tren de Cervantes.
Más información: www.turismoalcala.es