Cuando oímos de cerca la palabra ‘tumor’ nos echamos a temblar, pero ya si es maligno y se encuentra en el cerebro, aún temblamos más. De hecho, esta sensación, aunque sólo en parte, puede estar justificada, ya que los tumores cerebrales malignos y primarios del adulto (aquellos que nacen en el citado órgano), a diferencia de los benignos (90% de los casos), crecen de forma más rápida y agresiva, son más invasivos y pueden ser amenazantes para la vida, precisa la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).
No obstante, hay que estar tranquilos porque la Medicina está avanzando a pasos agigantados. De hecho, desde la Asociación de Afectados por Tumores Cerebrales en España (ASATE) celebran que en la actualidad los cirujanos tienen cada vez “más éxito” en la extirpación de tumores cerebrales, y estas intervenciones son cada vez más seguras, menos agresivas, y además conllevan un menor tiempo del acto quirúrgico.
En España, la SEOM apunta que los tumores primarios del Sistema Nervioso Central representan un 2% del total del cáncer en el adulto, y hasta casi un 15% en los niños menores de 15 años; “lo que nos indica que se trata, al menos en los adultos, de un tumor poco frecuente siendo su incidencia mayor en los hombres”.
Es más, destaca que la mortalidad en este tipo de cáncer “podría estar estabilizada” como consecuencia de los avances logrados en la materia, tanto en las técnicas diagnósticas de imagen, como en las múltiples mejorías obtenidas con los tratamientos.
En la actualidad, existen nuevas vías de tratamiento en investigación, algunas ya muy avanzadas, con antiangiogénicos, y que están ofreciendo nuevas esperanzas a los pacientes con un tumor cerebral
En el caso de los tumores cerebrales, el doctor Francisco de Asís Lorente, neurocirujano de Quirónsalud Zaragoza, lamenta que a día de hoy se desconozcan las causas que pueden originarlos. Según concreta, un tumor cerebral puede debutar con crisis epilépticas (convulsiones), como la falta de concentración, de lentitud de pensamiento, con cambios de carácter, con dolor de cabeza, o vómitos, o con síntomas más relacionados con la localización del tumor, como pueden ser alteraciones en los movimientos o del lenguaje, por ejemplo.
“En la actualidad, existen nuevas vías de tratamiento en investigación, algunas ya muy avanzadas, con antiangiogénicos, y que están ofreciendo nuevas esperanzas a los pacientes con un tumor cerebral”, remarcan desde ASATE en este sentido.
Desde el Grupo Español de Investigación en Neurooncología (GEINO) recuerdan que el paciente con un tumor cerebral debe ser sometido a una terapia específica, y a un tratamiento para el alivio de los síntomas: dolores de cabeza, crisis convulsivas, pérdida de funciones motoras, sensitivas, etc. “El tratamiento específico consistirá en cirugía con o sin radioterapia, radioterapia si no es posible la cirugía, y puede también estar indicada la quimioterapia, habitualmente en asociación a las otras formas de tratamiento”, precisa.
En cuanto a la cirugía, el doctor Severiano Cortés, neurocirujano de Quirónsalud Zaragoza, precisa que ésta representa una de las herramientas principales a la hora de combatir este tumor, y en general suele ser la primera en utilizarse para el tratamiento de la mayor parte de los tumores cerebrales.
Cortés subraya que la cirugía permite también descomprimir los tejidos sanos lo que conlleva una importante mejora de los síntomas que presentan los pacientes mejorando su funcionalidad y su calidad de vida
“En algunos de ellos puede ser suficiente para controlar la enfermedad”, señala, a la vez que indica que entre los objetivos principales de la cirugía se encontrarían realizar la máxima resección posible, pero conservando la máxima función, lo que en muchas ocasiones da lugar a que la cirugía de los tumores cerebrales no permita una resección completa del tumor.
Eso sí, el doctor Cortés subraya que la cirugía permite también descomprimir los tejidos sanos lo que conlleva una importante mejora de los síntomas que presentan los pacientes mejorando su funcionalidad y su calidad de vida.
Es más, sostiene que, de acuerdo con los últimos avances, en los diferentes estudios se ha podido demostrar que cuando la resección del tumor cerebral es completa, el pronóstico mejora “significativamente”, si se compara con aquellos casos en los sólo se puede hacer una biopsia, como sucede en pacientes en los que el tumor está cercano a zonas que rigen funciones críticas y la resección no es posible.
Nuevas tecnologías
“La cirugía es siempre de gran complejidad, pero cuenta hoy en día con nuevas tecnologías que permiten en gran medida resecciones más completas con menor riesgo de secuelas”, agrega el doctor Severiano Cortés, neurocirujano de Quirónsalud Zaragoza.
“Hoy en día, con una mínima invasión, obtenemos una máxima exposición ya que los últimos microscopios ofrecen un aumento y una definición tal de las raíces nerviosas que permite liberarlas de manera muy segura y muy eficaz”, subraya por su parte el doctor Francisco de Asís Lorente, que trabaja con el microscopio quirúrgico más avanzado del momento, ‘OPMI Pentero 800’, para intervenir tumores cerebrales primarios, metástasis cerebrales, y tumores benignos con una definición de imagen y precisión muy superior a la que había hasta ahora.
“Permite operar tumores malignos cerebrales primarios con un marcaje que, gracias a una luz especial que tiene el dispositivo, hace que el tumor brille y se diferencie del tejido sano, que no brilla. Por lo tanto, permite hacer una resección tumoral más segura y precisa dañando lo mínimo posible el tejido sano o incluso sin dañarlo”, aclara el especialista de Quirónsalud Zaragoza.
El doctor Severiano Cortés sostiene también que a estos avances habría que añadirles las últimas técnicas en neuronavegación, y un concepto de cirugía que consiste en hacer craneotomías pequeñas usando los corredores naturales del cerebro, “lo que provoca que los resultados estén siendo mucho mejores que hasta ahora”.