La situación actual que estamos viviendo, derivada de la pandemia, vislumbra que este Año Nuevo se celebrará en “petit comité”, con los más allegados y con pequeñas escapadas para disfrutar del aire libre. Si se está planificando realizar algún desplazamiento en coche durante estos días, se deben tener en cuenta diversos factores de seguridad vial.
Para evitar accidentes y sorpresas desagradables, Autopistas recomienda planificar muy bien el viaje. Es muy importante decidir con suficiente antelación la ruta que se va a seguir y anticipar qué es lo que se puede esperar de ella. Cuál es la carretera más segura, duración aproximada del trayecto o número de veces que será necesario detenerse a repostar son algunas de las cuestiones a las que conviene encontrar respuesta de antemano. Además, la compañía del Grupo Abertis recuerda la importancia de informarse del estado del tráfico antes de empezar el viaje e intentar evitar las horas de mayor intensidad.
Para evitar accidentes y sorpresas desagradables durante los desplazamientos navideño hay que planificarlos muy bien y decidir con suficiente antelación la ruta que se va a seguir
Factor meteorológico
Por las fechas en las que se celebra, la Nochevieja tiene, además, un condicionante que la hace especialmente peligrosa: la meteorología. Viento, lluvia, frío, niebla, nieve o hielo no son buenos compañeros de viaje, por lo que conviene informarse muy bien de las previsiones meteorológicas antes de plantearse meterse en el coche durante varias horas con toda la familia a bordo. En caso de meteorología adversa, Autopistas recomienda evitar los desplazamientos, y si esto no fuera posible, adelantar o retrasar el viaje tratando de encontrar unas condiciones más favorables.
En ruta
Una vez se ha decidido que se emprende el viaje, es imprescindible asegurarse de que el vehículo está en las condiciones óptimas para viajar. Uno de los aspectos que hay que tener presente son los efectos que las bajas temperaturas pueden tener sobre los componentes del coche. Es conveniente revisar el funcionamiento de la batería antes de ponerse en marcha. Si el vehículo es eléctrico, hay que comprobar que la batería está cargada al 100%. Además deben revisarse algunos otros elementos que no suelen utilizarse durante el resto del año, como la calefacción o la luneta térmica. Utilizar anticongelante en el radiador y en el depósito del limpiaparabrisas es otra de las recomendaciones a tener en cuenta. Un buen mantenimiento del parabrisas también resulta fundamental, ya que de esta forma se garantiza el correcto funcionamiento de los sensores instalados, que hoy en día ya llevan incorporados muchos vehículos, para la ayuda a la asistencia en conducción.
Uno de los elementos clave para preservar la seguridad del vehículo y de sus ocupantes son los neumáticos. Al fin y al cabo, son el único punto de contacto entre la vía y el vehículo. Antes de ponerse en ruta es imprescindible comprobar su estado y nivel de presión, siguiendo siempre las recomendaciones del fabricante. En cuanto al tipo de neumático, Autopistas aconseja usar neumáticos de invierno o “todo tiempo” para evitar sobresaltos. Hay que comprobar las etiquetas para escoger el más adecuado a cada necesidad. En caso de optar por otra opción más estándar, hay que asegurarse de que se llevan cadenas en el coche y, sobre todo, que se sabe colocarlas, ya que una helada o nevada intensas no es el contexto idóneo para aprender a hacerlo.
Antes de ponerse en ruta es imprescindible comprobar el estado y nivel de presión de los neumáticos, siguiendo siempre las recomendaciones del fabricante
Otra de las cuestiones que hay que tener previstas es el equipamiento básico que se carga en el coche. ITV en vigor, documentación en regla, chaleco reflectante, triángulos de emergencia y rueda de recambio o, en su defecto, una alternativa para pinchazos son elementos exigidos por ley y su ausencia, además de un problema de seguridad, puede acarrear una multa.
Pero hay otros ítems que, aunque no son obligatorios, también conviene meter en el coche, ya que pueden sacar al conductor y a sus acompañantes de más de un apuro. Agua y comida, ropa de abrigo, un botiquín, una linterna, un teléfono móvil y un cargador adaptable al vehículo, un papel y un bolígrafo, y guantes y ropa de abrigo a mano por si resulta necesario abandonar el vehículo por cualquier circunstancia formarían parte de ese kit esencial.
Blanca Navidad… pero no en carretera
Conducir con nieve es una perspectiva que inquieta a muchos conductores y sobre la que no demasiados tienen experiencia. La nieve suele venir acompañada de niebla, lo que reduce sensiblemente la visibilidad del conductor. Autopistas aconseja disminuir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad para asegurar la frenada en caso necesario. Si los equipos de vialidad están actuando para retirar la nieve acumulada de la carretera o realizando tratamientos de extendido de fundentes, se recomienda dejar libre el carril izquierdo para facilitar el paso de los vehículos de emergencia y las máquinas quitanieves.
Otras recomendaciones generales para nieve son retirar el hielo que pueda haberse formado en las lunas del vehículo durante la noche y arrancar el motor con suavidad (sin acelerar en caso de los vehículos diésel). Las frenadas deben ser suaves para no perder el control del vehículo y levantando el pie del acelerador para retener el motor. También es importante no conducir con el abrigo puesto, pues reduce la movilidad al volante.
Una situación mucha más reconocible para el conductor medio es conducir bajo la lluvia. Sin embargo, en vías rápidas el agua también es peligrosa. La combinación de calzada mojada, con la consiguiente menor adherencia de los neumáticos, disminución de visibilidad y velocidad inadecuada pueden hacer que se pierda fácilmente el control sobre el vehículo y provocar un accidente. Mantener la calma, moderar la velocidad, aumentar la distancia de seguridad, evitar que el vaho se acumule en la luna delantera y usar las luces de cruce y antiniebla para ver y ser visto son algunos de los consejos básicos para este tipo de conducción.
Mantener la calma, moderar la velocidad, aumentar la distancia de seguridad y usar las luces de cruce y antiniebla son algunos de los consejos básicos para conducir con nieve o lluvia
Si a pesar de todas estas indicaciones, se sufre un percance como un pinchazo o una avería, lo primero que hay que hacer es intentar parar con seguridad en un lugar habilitado para ello o lo más próximo posible al arcén derecho. Después hay que señalizar la avería por medio de las luces de emergencia y, si es posible hacerlo con seguridad, salir del vehículo con el chaleco reflectante puesto para colocar el triángulo. En autopistas hay que colocar uno y solo si las condiciones del tráfico lo permiten
Lo siguiente es situarse detrás de la barrera de seguridad y acercarse a uno de los postes SOS para contactar con el Centro de Operaciones y Seguridad Vial de Autopistas o con los servicios de emergencias 112.
En definitiva, no se trata de cogerle miedo a la carretera, sino de tomar las medidas necesarias y adoptar comportamientos seguros para garantizar que nos lleva con seguridad hasta la Nochevieja que habíamos planeado.