Conseguir una transición energética justa e inclusiva que vaya acompañada no sólo de un plan industrial y de la propia producción de energía renovable, sino también de un proyecto de desarrollo social y económico a largo plazo integrado en el territorio. Ese ha sido el planteamiento de partida del foro ‘Nuevo modelo energético: claves para una transición justa’, organizado por Vozpópuli con el patrocinio de Endesa que se ha celebrado en Madrid.
La periodista de la Sexta Marina Valdés fue la encargada de conducir un debate que contó con la participación de Juan Manuel Ávila Gutiérrez, alcalde - presidente del Ayuntamiento de Carmona y cabeza de lista al Senado por Sevilla; Juan José Berbel, socio en Metyis; José Alfredo Martín Piñas, cofundador de Apadrinaunolivo.org, y Juan Álvarez Avello, director de los proyectos Futur-E de Endesa.
“Estamos inmersos en un proceso de cambio climático que debe ser frenado. Por esa razón, urge acelerar la transición energética, pero siempre desde el equilibrio, para que sea justa, inclusiva y sostenible desde un punto de vista económico y social. Porque de nada sirve el cambio de modelo si nos dejamos a gente por el camino”, dijo la periodista Marina Valdés en la apertura del debate.
Un ejemplo de esa sostenibilidad y equilibrio es la localidad sevillana de Carmona, que, con 34 proyectos de energías renovables en 2023, más de 3.000 millones de inversión y alrededor de 2.500 empleos generados en el sector, está considerada como una de las capitales españolas de la energía solar. Para su alcalde, el popular Juan Manuel Ávila Gutiérrez, la información es un elemento clave en este proceso de transición energética. “Carmona va a ser un ejemplo de lo que significa generar energía limpia con 1.000 millones de toneladas de CO2 evitados al año, y la ciudadanía ha de ser consciente del modelo energético que estamos implantando. Un modelo que está transformando la ciudad, que no solo genera una energía limpia y mucho más barata, sino que trae consigo rehabilitación de edificios, proyectos de nueva construcción y una acción directa sobre el bienestar de la ciudadanía”.
La información es un elemento clave en este proceso de transición energéticaJuan Manuel Ávila Gutiérrez, alcalde de Carmona.
Juan José Berbel, socio en Metyis, desgranó las que, a su juicio, son las palabras clave que han de acompañar este proceso de transición justa, aquellas que van a permitir vencer las reticencias que siempre surgen alrededor de este tipo de proyectos: “Información, anticipación, flexibilidad y equilibrio con el cambio social de la población”. Porque, argumentó, “no se trata únicamente de un cambio energético, sino también un cambio social, y ése es siempre más lento”.
La transición justa no es únicamente un cambio energético, sino también socialJuan José Berbel, socio en Metyis
La transición energética justa
Una empresa que tiene muy clara esa dimensión social y vinculada al territorio de la transición energética es Endesa. La eléctrica está inmersa desde hace años en un complejo proceso de transformación de sus centrales térmicas que, lejos de limitarse a su cierre y desmantelamiento, busca dar una segunda vida en clave sostenible a esas instalaciones. “Al mismo tiempo que hay que crecer en renovables, es necesario afrontar el cierre de las centrales de carbón. En nuestro caso, son cinco centrales, un proceso que involucra a más de 1.500 trabajadores directos de Endesa y de las compañías contratistas. El gran reto es encontrar una opción de futuro para esos municipios que históricamente han vivido de la actividad económica asociada a las centrales de carbón. Buscamos soluciones muy concretas, que permitan desarrollar proyectos de energía renovable y generar con ellos más empleos de los que se pierden con el cierre de las centrales”, explicó Juan Álvarez Avello, director de los proyectos Futur-E de Endesa.
El gran reto es encontrar una opción de futuro para esos municipios que históricamente han vivido de la actividad económica asociada a las centrales de carbónJuan Álvarez Avello, director de los proyectos Futur-E de Endesa.
Un caso de éxito de esa visión transformadora es la central de Andorra (Teruel). Tras su cierre y demolición, Endesa está desarrollando un proyecto de 1.500 millones de euros de inversión que va a permitir generar 1.800 megavatios de energías renovables. La iniciativa incluye un ambicioso plan de acompañamiento, en el que participan más de 30 socios, que va a permitir la creación en la zona de 5.300 empleos de aquí a 2028, 500 de los cuales serán permanentes no solo en renovables, sino también asociados a los sectores primario y secundario.
Crear valor
Uno de esos socios de Endesa que ha sabido darle una vuelta de tuerca más en clave sostenible a un proceso de transición justa es Apadrinaunolivo.org. El proyecto lleva 9 años ayudando a la regeneración de la comarca de Oliete (Teruel), no solo desde un punto de vista agrícola, sino también demográfico y de dinamización económica de la comarca. ¿Su secreto? Fórmulas creativas y muy conectadas con la idiosincrasia local. “La despoblación hizo que más de 100.000 olivos quedaran abandonados en Oliete. El problema es que cuando un olivo no es cuidado no genera fruto y tarda 4 años en volver a hacerlo. Lo que hicimos fue buscar empresas que apadrinaran esos olivos mientras volvían a producir”, expuso el cofundador del proyecto, José Alfredo Martín Piñas.
Esta organización sin ánimo de lucro no se plantea su labor como una mera transacción en la que las empresas aportan dinero. “Los padrinos viven la experiencia de cómo ese árbol vuelve a la vida, asisten a su bautismo, reciben aceite producido por su olivo, vienen al pueblo… En definitiva, se implican emocionalmente con el proyecto", dijo este emprendedor social. Gracias a esta fórmula, la iniciativa cuenta ya con 7.000 padrinos, ha creado creado 15 empleos directos y la zona ha ido recuperando su actividad agrícola. El siguiente paso fue crear una almazara “en la que los agricultores recibían un precio justo por la oliva”, y una marca de de aceite propia que permite su comercialización y ayuda a la sostenibilidad del proyecto.
Hemos conseguido 7.000 padrinos, crear 15 empleos directos y que la zona haya ido recuperando su actividad agrícolaJosé Alfredo Martín Piñas, cofundador de Apadrinaunolivo.org
Impacto ambiental
Como todo cambio de calado, la transición energética encuentra obstáculos, la mayoría de los cuales, explicaron los ponentes, proceden de la desinformación y el desconocimiento. Los posibles impactos ambientales o paisajísticos son objeciones habituales cuando uno de estos proyectos llega a un territorio. “Frente a la postura del ‘estoy de acuerdo con la transición energética, pero no en mi pueblo’ hay que impulsar fórmulas que incidan en el concepto del valor social compartido”, insistió Juan José Berbel. Un planteamiento que, según este experto, incluye, entre otras cosas, planes globales que identifiquen proyectos locales a los que apoyar y elegir muy bien al compañero de viaje. "Es importante elegir socios no especulativos, que apuesten por el largo plazo, vayan más allá de la pura implantación del parque y tengan la sensibilidad necesaria para identificar las necesidades de tu comunidad”.
El proyecto transformador de Carmona ha procurado tener en cuenta todos esos delicados equilibrios medioambientales que supone la llegada de los molinos al paisaje local. “Nuestros parques ocupan únicamente un 3,5% del término, no hemos talado ni un solo árbol y, de hecho, los parques han permitido la recuperación de especies como la avutarda o el resurgimiento de una actividad tradicional de la zona como es la apicultura”, destacó el alcalde, Juan Manuel Ávila Gutiérrez.
Los expertos coincidieron en que otras claves para el éxito de este tipo de proyectos son un apoyo sin fisuras de las distintas Administraciones. Para ello, se necesitan “estabilidad normativa” y procesos legales que, sin dejar de ser garantistas, “ganen en agilidad y proporcionen estabilidad a inversores y empresas”.
Para finalizar, Juan Álvarez Avello recordó que la transición energética no solo es una oportunidad para los pueblos que tienen renovables, sino que es una oportunidad de país. “Tenemos mucho sol, mucho viento y somos un referente en descarbonización. Podemos ser lideres europeos en energías renovables. Y tenemos que hacerlo de tal manera que eso de ‘no dejar a nadie atrás’ no sea simplemente una frase hecha, sino una realidad”.
