Hace una década, el brasileño Adriano Leite era uno de los delanteros más diferenciales del planeta fútbol. Apodado 'El Emperador', su combinación de potencia y talento le valieron para subyugar a sus rivales en la Copa América de 2004 y la Confederaciones del año siguiente. En invierno, el Inter de Milán era el que disfrutaba de un punta realmente imparable.
Sin embargo, en 2008 comenzó un ocaso deportivo paulatino, regado con problemas de depresiones, que le ha sumido en un túnel de difícil salida y le ha apartado de pleno del estrellato. Tras intentar volver a jugar muy fuera de forma en Brasil, la última oportunidad de vestirse de corto se la dio el modesto Miami United. Tras un nuevo gatillazo en Estados Unidos, Adriano se encuentra sin equipo y su vida personal parece haberse vuelto turbia.
Un día más en la vida de Adriano. pic.twitter.com/rglXJmrpFn
— Andrés Cabrera (@AndresCabreraQ) August 2, 2016
Así lo informaban varios medios brasileños, que adjuntaban imágenes suyas viviendo entre delincuentes en una favela de Río de Janeiro. Siempre cercano a malas compañías en su país, las informaciones apuntarían a que se rodea de una banda armada que se ha convertido en su nueva familia.
Recordemos que el delantero brasileño, de 34 años, ha protagonizado en los últimos meses varios incidentes con la policía carioca. Fue arrestado por presunto tráfico de drogas en el mes de mayo y también fue detenido tiempo después cuando una mujer recibió un impacto de bala cuando estaba en el asiento del copiloto de su coche. No parece precisamente un final feliz para la carrera de quien estaba llamado a reinar en el fútbol mundial.