Ha sido bautizado como Al Rhila y es el primer balón de fútbol conectado del planeta. Con él se está jugando el Mundial de fútbol de Qatar 2022. En sus tripas guarda un sensor que facilita la tarea a los árbitros que pitan lo que sucede en los campos de fútbol del país.
El esférico informa de cuándo es o no fuera de juego, entre otras cosas, al VAR. Está conectado a un sistema de cámaras ubicado en el estadio que es el que permite elaborar los videos en tres dimensiones (3D) que se están haciendo tan populares en las retransmisiones de la cita mundialista para que los espectadores entiendan mejor lo que sucede en determinadas situaciones.
Como si de un teléfono móvil se tratara, Al Rhila debe ser cargado periódicamente para seguir enviando información. Lo hace a través del aire, mediante tecnología de inducción. No necesita enchufes.
Si quieres conocer más detalles acerca de esta particular pelota, te recomendamos que le eches un vistazo a la pieza que hemos elaborado en Vozpópuli, y que acompaña esta información.