El tenista español Carlos Alcaraz se clasificó este viernes para la final del torneo de Wimbledon, tercer 'Grand Slam' de la temporada y que se disputa sobre hierba en Londres (Reino Unido), tras ganar sólidamente al ruso Daniil Medvedev por un triple 6-3 en algo menos de dos horas. El deportista nacido en El Palmar (Murcia) ha mostrado un juego perfecto en el que solo ha cometido 5 errores no forzados, y todos ellos solo en el primer set.
En la Pista Central del All England Lawn Tennis & Croquet Club, donde parece haber brotado un idilio con las gradas, Alcaraz apabulló sobre todo en los dos primeros sets. Precisando las dejadas, clavando su particular telemetría para los golpes largos y haciendo correr a su adversario, el murciano prolongó su racha londinense.
Carlos Alcaraz con solo 20 años se ha convertido en el cuero jugador más joven en clasificarse para una final de Wimbledon por detrás de Boris Becker +, Borg y, su compatriota, Rafa Nadal. El murciano también ha conseguido ser el tercer tenista español en llegara ala final de este 'Grand Slam', junto con dos leyendas como lo son el anteriormente mencionado Nadal (hasta en 5 ocasiones) y Manolo Santana (una solo vez en el 66).
Claves de la victoria de Alcaraz
La clave de la victoria fuera la manera de afrontar la primera pelota de 'break' en contra en el segundo juego, salvando esa bola como si nada. Otro aspecto a valorar de la estrategia del tenista entrenado por Juan Carlos Ferrero ha sido el cómo ha insistido en el punto débil del ruso Medvedev: su revés.
Las cifras de Alcaraz sobre el verde de Wimbledon empiezan a ser escalofriantes y dignas de toda una 'leyenda viva' del tenis. Sobre la moqueta verde londinense ha ganado 15 partidos y solo ha concedido dos derrotas en las pocas ediciones de este torneo que el español ha disputado.
Tres han sido las veces que se enfrentado el español con el ruso, siendo esta victoria de nuestro 'Carlitos' la segunda en este duelo directo; frente a una solamente de Daniil conseguida precisamente en el Wimbledon de 2021. Esta ha sido la particular manera que ha tenido el murciano para vengarse de aquella derrota hace dos años.