Tras otra cita frustrante, y encima en casa -GP de España-, Fernando Alonso salió corriendo. O, mejor dicho, volando. Huyó de una Fórmula 1 que no le da más que disgustos rumbo a la ilusionante cita de la Indycar.

Primero, eso sí, dejó otro recadito a Honda, cuyo motor le hace arrastrarse por los circuitos de todo el mundo desde qie comenzó el actual Mundial de F1.

El dos veces campeón del mundo terminó por vez primera en lo que va de curso una carrera, aunque no pudo defender la séptima posición que consiguió en la sesión de clasificación del sábado.

"Estoy contento de cómo ha ido el fin de semana de todas maneras. Ayer (sábado) pude hacer una vuelta súper y hoy (domingo) mi coche ha acabado sin problemas mayores. Así que pasito a pasito", explicó tras la carrera disputada en el trazado de Barcelona-Cataluña.

No obstante, el piloto asturiano se mostró crítico -otra vez- con las prestaciones del motor que proporciona Honda, una circunstancia que, según su opinión, le impide luchar todavía por los puntos.

"El punto de inflexión llegará cuando Honda traiga una evolución potente. Al final yo creo que de chasis no vamos mal para estar en la Q3 de manera normal, pero nos falta ahora potencia y fiabilidad. Ojalá se haya solucionado la fiabilidad viendo que el coche ha acabado perfectamente", resaltó.

En este sentido, el asturiano admitió estar "frustrado por no tener una máquina" que le permita "luchar delante", si bien prefirió mirar el lado positivo de las cosas.

"La mitad de los pilotos de la parrilla no han subido nunca al podio. Yo no me puedo quejar. Son unos años de dificultades, pero llegaran mejores momentos", agregó.

Tras el pobre duodécimo puesto en Montmeló, Alonso ya piensa en las 500 Millas de Indianápolis, que correrá el próximo 28 de mayo. De hecho, el asturiano viajó el mismo domingo hasta Estados Unidos donde este lunes ya realizará los primeros entrenamientos.

"Ahora paso la noche en el avión, aterrizo y me subo a otro coche. Me quedan 14 horas para descansar en el avión. Tengo una semana de entrenamientos. La crono es el próximo fin de semana y tengo unos días libres que los dedicaré a la promoción. Llegaremos al domingo 28 de mayo con las fuerzas justas pero con ganas de pasarlo bien", explicó.

Y, raudo, se fue a tomar un avión privado junto a su director deportivo, Eric Boullier, y el director ejecutivo de McLaren, Zak Brown:

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— Eric Boullier (@eboullier) May 14, 2017

#SpanishGP done, it's #Indy500 time!! ??✈️???? pic.twitter.com/iKG2dDDST3

— McLaren Indy (@McLarenIndy) May 14, 2017