El Real Betis, con su triunfo por 3-0 ante el Alcorcón, se ha asegurado esta noche su duodécimo ascenso a Primera División, y además como campeón, a falta de dos jornadas para que concluya el campeonato de Segunda y una campaña después de descender. La formación verdiblanca, tras la victoria por 2-4 en Santander ante el Rácing del pasado jueves, llegó a esta cuadragésima jornada de la Liga Adelante dependiendo de su resultado para la vuelta a la Liga BBVA, aunque también tenía la posibilidad de lograrlo antes de jugar si el Girona perdía ante el Llagostera, lo que no sucedió (1-0), o el Sporting no pasaba del empate ante el Tenerife, lo que tampoco ocurrió (2-0).
Con ello, los verdiblancos tuvieron que confiar sólo en ellos para certificar el retorno a Primera en esta jornada y necesitaron ganar para conseguirlo y además también matemáticamente como campeones, a falta de jugar aún dos encuentros más. Como ya sucediera en su anterior ascenso, en la campaña 2010-11, en la que también subieron como campeones, Pepe Mel ha estado al frente del equipo, aunque en esta ocasión llegó mediado el curso tras ser destituido el que lo inició, Julio Velázquez, al que no le acompañaron los resultados ni el juego del equipo.
También como en aquella temporada, en la que se subió con cuatro jornadas de antelación, otra pieza fundamental en el equipo ha sido el delantero Rubén Castro, quien se ha convertido en el máximo goleador de la categoría esta campaña y en el máximo goleador en la historia del Betis. La entidad hispalense ha enderezado el rumbo deportivo después de una nefasta pasada temporada en la que se consumó el descenso como colista descolgado jornadas antes de que concluyera el torneo.
El Betis, inmerso aún en un concurso de acreedores y en pleitos judiciales por la propiedad del paquete accionarial mayoritario del club, ha encontrado en los últimos meses a un presidente, Juan Carlos Ollero, quien accedió al cargo el pasado noviembre, que ha gestionado el club con racionalidad para que no se descentrara la marcha deportiva. En la centenaria historia del club verdiblanco, su primer ascenso a la máxima categoría llegó en la campaña 1931-32, hecho que le convirtió en el primer equipo andaluz que jugó en la elite nacional.
Después llegaron los de los ejercicios de 1941-42, 1957-58, 1966-67, 1970-71, 1973-74, 1978-79, 1989-90, 1993-94, 2000-01, 2010-11 y éste del 2014-15. En Real Betis, en sus anteriores once ascensos, llegó a la Primera División con la vitola de campeón en seis ocasiones: 1931-32, 1941-42, 1957-58, 1970-71, 1973-74 y 2010-11. Como segundo clasificado lo hizo en otras cuatro oportunidades (1966-67, 1989-90, 1993-94 y 2000-01), mientras que el otro ascenso fue como tercero (1978-79). Ahora, de nuevo en la elite de fútbol nacional, el Betis cumplirá la venidera campaña el número redondo de cincuenta temporadas en Primera División y lo hará con el firme propósito de consolidarse y no ser un equipo de los llamados 'ascensores'.
Más aún, sus gestores confían en que se normalice el club en su aspecto accionarial y que con la gran masa social que tiene detrás -este curso ha superado los treinta mil abonados en Segunda- compita siempre en la zona media-alta de la clasificación.
