La FIFA como tal se lava las manos. Son los expertos de su Comisión de Fútbol los que junto a un grupo de especialistas de la revista 'France Football' han decidido que Diego Pablo Simeone no esté tampoco esta vez en la lista de diez candidatos al entrenador mundial del año. Sí están Mourinho y Wenger, que ya me dirán ustedes de qué pueden presumir en 2013. Y Benítez, que ha conquistado la Liga Europa, título que en 2012, cuando lo conquistó el Cholo, reforzado por la Supercopa, no se tuvo en cuenta.
Y figuran en la relación Ancelotti, Del Bosque, Conte, Ferguson, Heynckes, y Klopp. Y también Scolari, al que es de suponer que le reconocen por el triunfo en la Copa de las Confederaciones, no por su incendiaria y casi delictiva manera de llevar el caso Diego Costa. Pero Simeone, que lleva el año que lleva, no está.
Es evidente que no es una elección objetiva, una nominación agarrada a los títulos y las estadísticas en comparación con el material que se maneja. Así que habrá que concluir que es una cuestión de gustos. Del paladar futbolístico de quienes componen la citada Comisión del Fútbol de la FIFA. A saber, exfutbolistas o entrenadores, gente del balompié, a los que no es fácil discutirle el criterio: Platini, Karembeu, Bilardo, Chilavert, Rummenigge, Albertini, Maturana, Beckenbauer o Pelé.
El fútbol español, por supuesto, también está representado en esa Comisión de Fútbol que la FIFA detalla abiertamente en su página web. El español que figura en la nómina de ilustres futboleros es Florentino Pérez, que no tiene pasado como jugador, pero es el presidente del Real Madrid. No se concreta a quién votó, si discutió acaloradamente durante el proceso o se si se abstuvo. Ni siquiera si se presentó. Pero su nombre, según se lee en el comunicado de la FIFA, aparece entre los firmantes.
