Este jueves por la mañana el Ayuntamiento de Madrid presentó un plan de movilidad para el entorno del estadio de La Peineta, sede del Atlético de Madrid desde la próxima temporada, en el que pedía a la Comunidad de Madrid la apertura de dos nuevas estaciones de Metro de la línea 2 (Las Rosas-Cuatro Caminos) y al Ministerio de Fomento una estación de Renfe y obras en la M-40.
Horas después, a media tarde, el consejero de Transportes, Vivienda e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, respondió públicamente asegurando ante los periodistas que el Gobierno regional no prevé ampliar la red de Metro ni en su programa "ni tampoco presupuestariamente".
El consejero ha recordado que el "principal compromiso" de la presidenta de la región, Cristina Cifuentes, en "materia de incrementar el número de estaciones" consiste en "la puesta en funcionamiento de la estación de Arroyo Fresno", en la línea 7, que aún aguarda su inauguración desde que finalizara su construcción en 1999.
Sin embargo, Rollán ha insistido en "la importantísima cantidad" de reformas en infraestructuras que el Gobierno madrileño planea hacer para "renovar y mejorar" el servicio de Metro.
La reclamación del Ayuntamiento implicaría un cambio del trazado inicialmente previsto para la expansión de la línea 2, proyecto actualmente en suspenso.
El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento, José Manuel Calvo, había dicho que su plan tiene como objetivo adecuar el barrio de San Blas al aumento del tráfico que se producirá cuando el Atlético de Madrid cambie de sede el año que viene.
Para ello, Calvo estima "necesario e inteligente" construir una estación de Metro en Las Rejas y otra en La Peineta, para garantizar "una mejor salida y acceso" al estadio. Según las palabras de Rollán, petición denegada.
El concejal del Gobierno que preside Manuela Carmena aprovechó para insistir en otra solicitud: que se implante un billete intermodal de autobús, Metro y Cercanías, algo que también requiere el visto bueno de la Comunidad para poder llevarse a cabo. ¿Le hará Cifuentes otra peineta política?