El Real Madrid está indignado con la sanción que propondrá la Liga de Fútbol Profesional y el Consejo Superior de Deportes al club por los insultos que se escucharon contra Leo Messi y contra el Barcelona en el partido ante el Celta. En las gradas se escicharon cánticos de "Puta Barça, puta Barça", "Ser del Barça es ser un subnormal" y "Messi, Messi, Messi subnormal". En el acta del partido, el colegiado no recoge los cánticos.
Desde el club se entiende que se ha querido ejemplificar contra uno de los club que ha ejemplificado en la lucha contra los ultras, con la expulsión de Ultras Sur del Fondo Sur del Bernabéu. Después de conocerse la sanción, el Real Madrid actuó con celeridad y ha expulsado a 17 personas que ha identificado como responsables del inicio de los insultos contra Messi y el club azulgrana del sábado. Pero no es la única medida tomada por Florentino Pérez y su directiva.
Además, el club habría enviado un comunicado a los 1.500 integrantes de la Grada de Animación del Santiago Bernabéu, que se ubica en el tercer anfiteatro del Fondo Sur, para pedir precaución con los cánticos, especialmente con la nueva legislación que castigará la violencia verbal en los estadios.
La indignación de Florentino y su directiva, sin embargo, se contradice con la presencia de reconocidos miembros de Ultras Sur que se han reubicado en el Bernabéu, en lugar de ser expulsados del estadio. La Grada de Animación fue trasladada al tercer y cuarto anfiteatro. Allí se ubican 23 peñas dirigidas por La Clásica, Primavera Blanca, Orgullo Vikingo y Veteranos, en esta última se integra la vieja guardia de los Ultras Sur, hasta 60, con el fundador Ochaíta al frente. Otros 200 fueron dispersados por el estadio y 30, los más violentos, fueron expulsados. A esos 30 se suman 17 más ahora. Pero siguen quedando ultras en el Bernabéu.
