El piloto español Fernando Alonso (McLaren) no pudo confirmar "al cien por cien" su presencia en el Gran Premio de China, después de no recibir el visto bueno a competir en Barhéin por culpa de un "pequeño neumotórax" en el pulmón izquierdo y una fractura de costilla producida tras el espectacular accidente sufrido en el Gran Premio de Australia.
"Estoy un poco decepcionado, como pilotos queremos correr porque somos competitivos y queremos competir, y venir aquí y ni siquiera poder intentarlo es triste, pero es comprensible y voy a respetar la decisión", expresó Alonso en la rueda de prensa oficial.
"No es al cien por cien seguro que pueda correr en China. Tengo que pasar otras pruebas en los próximos 8 ó 10 días y después la FIA me volverá a evaluar"
El asturiano recalcó que lo había intentado "todo hasta el último momento" para por lo menos "competir en los entrenamientos libres". "He pasado día de dolor, pero estaba listo para aguantar en el coche para asegurarme que podía correr. El dolor puedes olvidarlo, pero hay otros riesgos y los doctores creen que es un riesgo correr, hay que intentar minimizar todo", remarcó.
El bicampeón del mundo indicó que estaba "bastante bien el domingo" tras el accidente, con "un poco de dolor en la rodilla pero nada grave" y por ello "tenía luz verde de los doctores". Sin embargo, el lunes comenzó a tener "un poco de dolor general pero nada serio", y tras regresar a España "el dolor era bastante similar o un poco peor".
Por ello, se sometió a un "chequeo total" que descubrió que tenía "un pequeño neumotórax". "Seguimos el consejo de los doctores de seguir tranquilos y esperar que volviera a la normalidad. Hemos repetido el escáner y el neumotórax se ha ido, pero tengo una costilla fracturada y hay un riesgo de que haya problemas porque las Fuerzas G pueden hacer que fuera a peor y no es como tener una pierna rota", comentó.
Además, dejó claro que "no es algo al cien por cien seguro" que pueda correr en China. "Tengo que pasar otras pruebas en los próximos 8 ó 10 días y después la FIA me volverá a evaluar para ver si puedo correr. Primero es la seguridad y luego el rendimiento, con suerte todo irá bien", deseó.
"No pensamos mucho sobre el riesgo, incluso ahora que tengo la costilla rota y estoy con algo de dolor, que me hace complicado dormir a veces, me gustaría subirme el coche y ver como evoluciona el dolor. Esto es un deporte de motor y puede pasar cualquier cosa y asumes el riesgo", prosiguió sobre los riesgos, dejando claro que se recuperará pronto. "Hay muy poca opción de que esto sea un riesgo en el futuro, pero queremos pilotar con riesgo cero. En los próximos días la costilla debe estar bien", sentenció al respecto.
"No pensamos mucho sobre el riesgo, incluso ahora que tengo la costilla rota y estoy con algo de dolor, que me hace complicado dormir a veces, me gustaría subirme el coche"
En este sentido, recalcó que no tiene "pesadillas" con el accidente y que ha tenido "mucha suerte" en su larga carrera en la F1, por lo que considera "normal" tener accidentes, aunque "desafortunadamente" ha sufrido dos en los dos últimos años que le han hecho perderse un Gran Premio.
"El último fue un impacto bastante grande y sabia que me arriesgaba a no correr. Quedaban 10 días y traté de hacerlo lo mejor posible y el equipo hizo un trabajo fantástico para tener el coche listo. Ahora trataré de ayudar a Vandoorne, que tiene una gran oportunidad, y al equipo porque adoro lo que hago. Quiero aprender desde fuera como el equipo prepara la carrera, el nuevo sistema de calificación y la estrategia, quiero involucrarme en todo lo de fuera porque puede ayudarme", añadió al respecto el ovetense.
Sobre el accidente, resaltó que "simplemente" quería salir "lo antes posible" y que cree que con el 'Halo', el sistema de protección del 'cockpit' que podría entrar en vigor en el futuro, habría podido salir "tan rápido". "Supongo que no porque estará hecho de tal forma que tendrá en cuenta esto. Mi única preocupación era que mi cabeza no diera con el suelo, no quería que chocara en ningún sitio", confesó.