Tal y como anunció el Barcelona el pasado martes, Messi ha firmado este jueves por la tarde su renovación hasta 2018. Lo hizo a su regreso de Suecia, donde jugó con su selección. El 18 de diciembre pasado, se hizo público el acuerdo con el argentino para ampliar dos años más el contrato actual, que finalizaba en junio de 2016. La cláusula se mantiene en 250 millones y es la sexta vez que Messi renueva por el Barça.
Con el 10 atado, el siguiente objetivo de Sandro Rosell es adelantar al verano que viene la llegada de Neymar. El presidente del Barça lleva desde que se hizo cargo del club intentando fichar al brasileño. Sin embargo, la temporada pasada tenía la oposición de Guardiola. Neymar es un futbolista que entusiasma a Pep, aunque si algo tenía claro el técnico catalán cuando aún dirigía al Barça era su incompatibilidad con Messi. No futbolísticamente, pues Neymar podría jugar escorado a la izqu¡erda, sino porque considera complicado que Leo acepte en el vestuario a un jugador que mediáticamente le pueda hacer sombra.
Dos gallos en un mismo corral. Guardiola aún recuerda lo que le ocurrió con Etoo, aunque especialmente difícil para gestionar la situación de Ibra. Villa también sabe algo al respecto. Con Neymar podría ocurrir pefectamente lo mismo, sobre todo porque es uno de los jugadores más mediáticos del mundo y le gusta tener protagonismo con balón.
A diferencia de Guardiola, Rosell cree que Neymar y Messi tienen cabida en el Barça. "Los socios del Barça históricamente siempre ha querido tener a los mejores del Mundo y además dicen los técnicos que ell estio de su Neymar se parece mucho al del Barça". Sandro Rosell no confirma si, como se ha publigado, el Barça ha adelantado al Santos diez millones de euros para hacerse con los servicios de Neymar después del Mundial de 2014. No lo confirmó, pero en cierto modo tampoco lo desmintió. "A veces nos pasamos de transparencia y eso al final te acaba costando dinero".
