El FC Barcelona ha ganado al Manchester City (1-2) en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones y coge ventaja en una eliminatoria que sigue abierta debido al doble fallo final de Leo Messi en el descuento, al errar un penalti y el posterior cabezazo, y con un City que fue de menos a más que se vio torpedeado por la expulsión de Clichy en pleno arreón 'citizen', aunque los blaugranas irán como favoritos al Camp Nou.
Dominó el Barça la primera parte a placer, con el balón en su posesión y distribuyéndolo con sentido siempre con vocación ofensiva. Hubo ocasiones para irse con más ventaja que el 0-2 logrado al descanso, y es que un Luis Suárez enchufadísimo, un Messi desbocado y Rakitic e Iniesta moviendo muy bien al equipo bien pudieron sentenciar el partido. Por contra, la segunda parte fue 'citizen' hasta la expulsión de Clichy por doble amarilla. Los blaugranas llegaron a disponer de una posesión prolongada durante más de dos minutos, un rondo gigante que recordó a los de las mejores épocas de Guardiola. El partido estaba controlado a placer, en el mejor guión soñado, y la afición del City solo se hacía escuchar para abuchear al Barça e incluso silbar tímidamente a los suyos, pidiendo un poco más de sangre, de presión, de juego. Pero los blaugranas se multiplicaban en el césped anulando a los de azul cielo.
Eso sí, les hicieron caso a sus hinchas los locales tras el descanso, donde el Barça fue el que se vio encerrado atrás, con el City intentando desempolvar a sus figuras, que estaban ya en el césped pero desaparecidos, inéditos. Cambiaron las tornas y el Barça, hasta que no recuperó el balón y pudo dormir el partido, sufrió de lo lindo. Y cuando parecía que salía vivo, llegó el 1-2 de Agüero para dar una emoción que finalmente se truncó con la expulsión del lateral zurdo francés del City. Ahí el Barça, con Mathieu, Adriano y por último Pedro entrando para dar refresco, y uno más en el césped desde el minuto '74, volvió a hacerse con las riendas del partido. El año pasado (0-2 en idéntico escenario) cambió el partido el penalti y expulsión de Demichelis, esta vez la roja por doble amarilla no incidió, no fue clave, pero sí ayudó a volver a matar el duelo y a irse con ventaja a Barcelona. Era mejor el 0-2, hubiera sido mejor el 1-3, pero ya no volvió a brillar el Barça pese a seguir vistiendo de amarillo fosforito.
En la primera parte, en los mejores minutos blaugranas, hubo un gran desgaste físico también para los de Luis Enrique. Leo Messi, intercambiando posición con un buen Ivan Rakitic, bajó más de lo habitual para crear y estuvo inspiradísimo. Le salía todo al argentino, excepto el gol, y es que se vistió de asistente. Pero quien se salió fue Suárez. Había marcado un gol con el Liverpool al City en sus años en la Premier, y esta noche hizo doblete. A centro de Messi, con un buen desmarque del uruguayo, se aprovechó este de un rebote en Kompany para verse encarado a portería con el balón franco a sus pies, y de disparo cruzado y potente con la zurda esta vez no falló. Y el segundo llegó tras un jugadón de Messi, cambio de ritmo incluido, que abrió para Alba a la izquierda, este se paró, centró perfecto a Suárez que estirándose empalmó el balón del 0-2.
Esta exhibición, que quizá se quedó corta porque en la segunda parte no pudieron prorrogarla, pudo ser mayor pero Alves, en una jugada que solo él sabe qué quiso hacer, envió un balón al larguero. Peleó un balón y con suerte se llevó un rebote largo y se fue en carrera acompañado por Suárez y otro compañero, su centro se convirtió en un globo que dio en el larguero. Por parte del City, en los primeros 45 minutos, un solo disparo a puerta en el añadido, pero paró bien el alemán Ter Stegen el disparo de Nasri, duro y cercano al palo.
El Manchester City saltó al terreno de juego tras el descanso con una cara bien distinta a la de la primera parte. En los primeros cuatro minutos tuvieron hasta tres ocasiones, que fueron cuatro en 9 minutos. Una salida en tromba a la que sobrevivió el Barça gracias a Piqué, muy bien y destacando en una ya notable defensa, y Ter Stegen, atento al trabajo que tuvo. No entró un disparo cruzado del 'Kun' Agüero, mucho mejor también que en los primeros 45 minutos. Eso sí, fue el aviso del 1-2 con el que el argentino batió por fin al guardameta blaugrana. La clave del gol fue la dejada de espuelas de Silva y la fe del 'Kun' para llevarse el balón entre Mascherano, Piqué y Alba. Dio esperanzas y fue el premio al lavado de imagen del City, pero no fue suficiente como para ir con más ilusión al Camp Nou, donde el Barça deberá confirmar esta ventaja.
MANCHESTER CITY: Hart; Zabaleta, Kompany, Demichelis, Clichy; Nasri (Fernandinho, min.62), Fernando, Milner, Silva (Sagna, min.78); Dzeko (Bony, min.68) y Agüero.
FC BARCELONA: Ter Stegen; Alves (Adriano, min.75), Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Rakitic (Mathieu, min.71), Iniesta; Messi, Suárez y Neymar (Pedro, min.80).
GOLES. 0-1. Min.16, Suárez. 0-2. Min.30, Suárez. 1-2. Min.69, Agüero.
ÁRBITRO: Felix Brych (ALE). Amonestó a Fernando (min.90) en el Manchester City y a Rakitic (min.41), Alves (min.45), Adriano (min.88) en el FC Barcelona. Expulsó por doble amonestación a Clichy (min.59 y min.74) en el Manchester City
ESTADIO: City of Manchester Stadium.