El día después del fallecimiento de Johan Cruyff, el fútbol mundial, y especialmente el europeo, tuvo un recuerdo emocionado del holandés que cambió el estilo de juego de este deporte.
En el partido internacional amistoso que disputaron en el Amsterdam Arena las selecciones de Holanda y Francia se detuvo en el minuto 14 para homenajear a Cruyff. En ese momento, justo después del segundo tanto anotado or Francia, el árbitro, el alemán Felix Zwayer, marcó los 60 segundos de recuerdo a la mítica figura holandesa. Una gran pancarta asomó en uno de los fondos del estadio, con la imagen de Cruyff con la camiseta de Holanda y el dorsal 14, un número que pobló las gradas.
Los 50.000 espectadores que asistieron al recinto, puestos en pie, ofrecieron una cariñosa y atronadora ovación durante un minuto al legendario futbolista holandés, emblema del Ajax y del fútbol 'orange' y del Barcelona, donde triunfó como jugador y entrenador. Los jugadores, inmóviles sobre el césped, contribuyeron en silencio y con aplausos al homenaje a Johan Cruyff. Pasados los sesenta segundos, el balón volvió a rodar sobre el césped.
El inicio de los partidos fue el momento elegido en la mayoría de los partidos para dedicar un minuto a la memoria de Cruyff, que en casi todos los casos se produjo en medio de un aplauso generalizado dedicado a la figura del mejor jugador que ha dado Europa en la historia.
