Ya no hay vuelta atrás. La decisión está tomada. José Ángel Sánchez, director general del Real Madrid, saldrá del club este próximo verano. Según ha sabido 'Vozpópuli', el pulso con Florentino Pérez dilapida al hombre con más capacidad de decisión en el Bernabéu tras 15 años manejando los asuntos trascendentes de la entidad. Su responsabilidad directa en los últimos escándalos (el ridículo Cheryshev, fichaje y despido Benítez, el fiasco De Gea o la sanción FIFA) que salpicaron también al presidente han acabado con la paciencia del máximo mandatario. Florentino quiere estar por encima de todo y de todos. Y JAS hacía tiempo que estaba sentenciado.
José Ángel Sánchez ha estado en el ojo del huracán en los últimos meses provocando un auténtico cisma con Florentino. Uno de los episodios que han terminado de minar la confianza de Pérez con el director general lo provocó el enfrentamiento de este con Antonio García Ferreras, auténtica vaca sagrada del presidente. El antaño Director de Comunicación y Contenidos del Real Madrid pero todavía jefe de propaganda en la sombra y asesor presidencial al máximo nivel que viaja con las primeras plantillas, culpa a JAS del 'caso' Cheryshev. La guerra con el "vividor" Ferreras (según le tildó el periodista José María García) viene de lejos aunque Sánchez se ha ido granjeando poco a poco la censura de muchos en diferentes departamentos del club así como en la propia junta directiva del Madrid donde nadie le aguanta.
La cadena de errores en el pasado más reciente del Real Madrid necesitaban una cabeza de turco y Florentino ha visto la ocasión propicia para guillotinar a Sánchez. Discutido desde dentro pese al poder ejecutivo en las grandes operaciones deportivas y económicas, su peso e influencia se fueron diluyendo a medida que se acumulaban los descalabros en temas sustanciales.
Sánchez se ha granjeado la enemistad de Ferreras y Florentino le culpa del ridículo Cheryshev, fichaje y despido Benítez, el fiasco De Gea o la sanción FIFA
El papelón en el fracaso de la contratación de De Gea provocó un arranque de temporada que iba a marcar su destino final. Sin embargo, la auténtica 'mota negra' para JAS fueron los 'papeles' de Cheryshev y la eliminación copera o el 'caso' Bettoni por la licencia del ayudante de Zidane. Asimismo, la sanción impuesta por la FIFA le obligó a dar la cara por vez primera públicamente; y lo hizo a instancias del presidente, cansado de tener que dar explicaciones y que no quiso comerse ese marrón. La hoja de servicios de José Ángel Sánchez se fue enturbiando con la misma celeridad que Rafa Benítez acabó saliendo por la puerta de atrás del Real Madrid, fracaso que el número 2 del club quiso extender a Florentino por su fallo en la elección del técnico. Un error de cálculo imperdonable.
Sin embargo, Sánchez no ha perdido el tiempo. Su implicación en las contrataciones realizadas a lo largo de estos años con mando en plaza le ha permitido conocer el mercado futbolístico a la perfección y establecer los contactos idóneos de la mano de Jorge Mendes, el superagente que es a la vez otro de los hombres de confianza del presidente. Nadie duda de que el futuro del todavía director general del Real Madrid esté vinculado en no mucho tiempo a la representación de futbolistas para seguir haciendo negocio y amasando dinero. Su gran debilidad, como afirman quienes mejor le conocen.