Ya es oficial. Con 45 años, el histórico portero Gianluigi Buffon se retira del fútbol profesional después de su último paso por el Parma de la Serie B italiana. El guardameta cuelga los guantes después de 28 años de carrera profesional y se marcha siendo una de las grandes leyendas del 'deporte rey'. Los números que ha hecho a lo largo de su carrera son de auténtico mito de los terrenos de juego, dejando un legado difícil de igualar.
Este miércoles Buffon ha decidido decir adiós a través de sus redes sociales, donde ha hecho repaso breve de su carrera y ha dado las gracias a la afición del mundo del fútbol por todo el apoyo, la admiración y el cariño que le han mostrado durante su carrera.
En su larga trayectoria hay que destacar su increíble palmarés, en el que hay destacar las diez ligas italianas ganadas con la camiseta de la Juventus, el Mundial que ganó con la selección transalpina en el año 2006 en Alemania, los cinco Campeonatos del Mundo que ha disputado y las tres finales de la UEFA Champions League que jugó y que no pudo ganar. Seguramente esa sea la espinita clavada que va a tener clavada para siempre, la de no haber ganado nunca la tan deseada Orejona.
Buffon: ejemplo de deportividad y respeto
Más allá de sus logros deportivos, lo que más se valora de Gianluigi Buffon es la persona. El portero italiano es ejemplo de deportividad y respeto hacia sus rivales. Es por eso que nadie en el mundo del fútbol puede decir nada malo de este grandísimo futbolista, donde su forma de ser y su actitud sobre el terreno de juego ha hecho que tanto aficionados como compañeros de profesión admiren su figura.
Buffon ha demostrado ser un competidor nato en el que los años parecía que no pasaban por él. A su rendimiento le ha pasado lo mismo que al buen vino: cuanto más viejo, mejor es su sabor. Sus actuaciones y su importancia sobre el césped han ido mejorando a cada año que ha ido pasando por esas piernas y esas manos.
Hasta el último año de su trayectoria profesional, el bueno de 'Supermán' (así le apodaban) siempre ha tenido un objetivo claro o meta que alcanzar. Su tremenda competitividad y sus ansias de victoria han sido los motores que ha tenido Buffon para aguantar y perpetuar de manera casi eterna su continuidad en el fútbol. Prueba de esto fueron sus lágrimas al final de la temporada pasada por no haber podido ascender con el Parma a la 1ª división del fútbol italiano.
Lejos queda ya aquel debut como profesional contra el AC Milan en el año 1995, donde un joven Gianluigi de 17 años se puso los guantes por primera vez. Después de 6 años en el equipo que le vio crecer, en el 2001 firmó por la Juventus de Turín a cambio de 50 millones de euros. Hasta ese momento nunca se pagaron esas cantidades por e fichaje de un portero, dejando en menos las ofertas de todo un F.C Barcelona y de todo un Real Madrid.
Buffon vistió los clores blanco y negro de la Vechia Segnora hasta el año 2018, cuando decidió poner rumbo a Paría para jugar en el PSG. Después de estar solo una temporada en el Parque de los Príncipes, tuvo un fugaz regreso a Turín para volver a jugar con la Juve hasta 2021 para decidir terminar su carrera en el equipo donde todo comenzó: su siempre amado Parma. “Soy competitivo. No quiero que me consideren un suplente”, señaló Buffon hasta el final y con esa frase se despida todo un mito del fútbol mundial.