Este pasado miércoles el mundo de la natación se paralizó al ver como la nadadora estadounidense Anita Álvarez se desmayaba en el agua al término de su ejercicio en la ronda preliminar del Mundial que se está celebrando en Budapest. Su entrenadora, la española Andrea Fuentes, no se lo pensó dos veces, y vestida de calle se lanzó a la piscina para sacarla de la piscina, ayudada por un auxiliar del campeonato.
No es la primera vez que le ocurre a la norteamericana, pues según reconoció su entrenadora en declaraciones a 'El Partidazo' de la Cadena Cope, durante el preolímpico rumbo a Tokio del 2020 también vivió un episodio de desmayo: "En otra ocasión también tuve que socorrerla, pero no fue tan grave. Esta vez ha estado dos minutos sin respirar". "Cuando una nadadora acaba lo primero que hace es respirar, ella se hundía y nadie reaccionaba, así que me he tirado yo", explicó.
La nadadora estadounidense comenzó a desvanecerse en el agua y Fuentes tuvo que lanzarse para sacarla de la piscina, ayudada por un auxiliar del campeonato. "Los médicos insisten en que todo está bien (...) Los deportistas ponemos el cuerpo al límite, ha descubierto hoy donde está su límite", comentó.
"Estoy que no me lo creo. Ha sido apoteósico, Anita no respiraba. La he intentado despertar a bofetadas y abriéndole la mandíbula", sentenció Andrea Fuentes. La americana finalizó en séptima posición la prueba con una puntuación de 87.6333, justo por detrás de la española Iris Tió, que concluyó sexta.
¿Qué provocó el desmayo de Anita Álvarez?
Ante este episodio, la exseleccionadora española Ana Tarrés ha reconocido que ya vivió una experiencia similar con la salvadora y entrenadora de Anita álvarez, Andrea Fuentes: "Yo me tuve que tirar a rescatar a Andrea Fuentes en una competición. Era en Moscú (Rusia) en un Mundial Junior", ha señalado Tarrés a Mundo Deportivo.
Asimismo, la experta en natación sincronizada ha explicado cual es el motivo que provoca situaciones como la vivida este pasado miércoles: "En la composición de figuras obligatorias que se hacía antes, y que se terminaban con una máxima contracción de las vertebras del cuello, cerrabas el oxígeno y eso produce que colapse el cuerpo", ha puntualizado al rotativo catalán.
La federación frena la acción de los socorristas
La Federación Internacional de Natación (FINA) anunció hoy que revisará los actuales reglamentos que impiden la intervención de los socorristas sin una señal del árbitro, después de que no reaccionaran a tiempo el miércoles para asistir a la nadadora estadounidense Anita Álvarez, desmayada y que fue rescatada por la rápida intervención de la entrenadora española Andrea Fuentes.
En un comunicado, la FINA reveló que los socorristas contratados para trabajar en los campeonatos mundiales de natación solo pueden entrar en acción tras una autorización de los árbitros, razón por la que Fuentes fue más rápida que ellos.
El incidente se produjo en la jornada de ayer de los Mundiales de Budapest, cuando la nadadora estadounidense Anita Álvarez se desmayó al termino de su ejercicio en la final de solo libre de natación artística. susto.
Después de hacer señales a los salvavidas sin que éstos reaccionaran, la entrenadora se lanzó a la piscina para rescatar a su pupila. Posteriormente, declaró que los socorristas se habían quedado paralizados.
"Según los reglamentos, (los socorristas) solo pueden saltar a la piscina tras recibir una señal del cuerpo de árbitros", destacó el director del servicio de salud de los mundiales, Béla Merkely, en la nota.
Se trata de una restricción impuesta para evitar interrupciones de los programas de las competiciones "en caso de un eventual malentendido", explicó.
Merkely admitió que ayer los árbitros no reaccionaron enseguida.
"Después de que la entrenadora se lanzara en la piscina, los socorristas, viendo la situación, ya no esperaron la señal de los jueces e intervinieron", agrega.
Tras abandonar la piscina en camilla, la nadadora se recuperó y se encuentra fuera de peligro