El legendario pívot estadounidense Bill Russell, leyenda de los Boston Celtics y el que más veces ha ganado el anillo (11) de la NBA, ha fallecido a los 88 años, según ha confirmado su familia este domingo en un comunicado.
Bill Russell alcanzó la perfección con los Boston Celtics, franquicia en la que se convirtió en leyenda entre 1967 y 1969, al conseguir 11 campeonatos en sus 13 temporadas en la NBA, más que ningún otro jugador.
El exjugador se convirtió en una auténtica institución y forjó una carrera irrepetible. Con un palmarés envidiable como miembro del Salón de la Fama, Russell fue en 12 ocasiones 'All-Star' y 4 veces líder en rebotes. Unas cifras que le valieron para proclamarse el 'MVP' de las Finales como reconocimiento a su increíble trayectoria.
Su figura memorable también pasó a la historia por convertirse en el primer entrenador afroamericano de la NBA, tomando las riendas de los Celtics en 1966, equipo que retiró su dorsal '6' en 1972. Más allá de sus éxitos en la cancha, Russell fue la imagen de la NBA en lo relativo a los derechos civiles y en contra del racismo. Alguien que se puso de frente a las injusticias y aprovechó su posición para cambiar las cosas.
La familia recordó el legado del mítico pívot y su activo en la lucha de los derechos humanos. Entre las historias, destacaron el boicot de Russell a un partido de exhibición en 1961 para desenmascarar la discriminación "tolerada durante demasiado tiempo", hasta liderar el primer campamento de baloncesto integrado de Mississippi.
Unas acciones que fueron reconocidas con la concesión de la Medalla Presidencial de la Libertad en 2010, después de que Bill denunciase la injusticia con "una franqueza implacable" y con un "poderoso" ejemplo que nunca fue su "humilde intención", según afirmaron sus seres queridos.
El mundo del baloncesto llora su muerte
"Bill fue el mayor campeón de todos los deportes de equipo y representaba algo mucho más grande que el deporte: los valores de igualdad, respeto e inclusión que imprimió en el ADN de nuestra liga", dijo el comisionado de la NBA Adam Silver.
"A pesar de las burlas, las amenazas y las impensables adversidades, Bill se elevó por encima de todo y se mantuvo fiel a su creencia de que todo el mundo merece ser tratado con dignidad", añadió Silver.
La Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) lamentó la pérdida del estadounidense y también envió el pésame a su familia. Del mismo modo que el exjugador español Pau Gasol, quien destacó su contribución al baloncesto como "uno de los jugadores más dominantes" y del que tuvo "el honor" de conocer. "Gracias por todo lo que le has dado al juego y a todos nosotros. Descanse en paz", apuntó.