"Hace 16 años, el 2 de agosto, Marco ganaba el Tour (...) A todos los aficionados y en particular a los que han creído y querido a Marco les comunicó que el caso está reabierto por homicidio", explicó Tonina Pantani en su página de Facebook.
Paolo Giovagnoli, fiscal jefe de Rimini, localidad donde fue encontrado muerto en un hotel el campeón italiano, aceptó el recurso presentado por la familia Pantani en la que se defiende que el corredor fue asesinado y presenta una serie de pruebas. Según la tesis del abogado de la familia Pantani, Antonio de Rensis, el ciclista fue golpeado y obligado a beber cocaína diluida en agua y después los agresores simularon la muerte por sobredosis.
'La Gazzetta dello Sport' reconstruye este sábado en sus páginas la teoría del asesinato de Pantani al explicar que el día de la muerte de Pantani algunas personas subieron desde el garaje para no ser visto a la habitación del hotel Le Rose de Rimini. Pantani, según las pruebas aportadas por la familia, llamó hasta en dos ocasiones a la recepción del Hotel para que avisasen a los Carabineros de que estaba siendo molestado.
El corredor fue golpeado e inmovilizado, según algunas heridas que presentaba en la cabeza y en las muñecas y que no fueron tomadas en consideración en la primera investigación. Y los agresores le obligaron a beber cocaína, según los resultados de una nueva pericia que sostiene que la cantidad de droga encontrada en el cuerpo de Pantani sólo se pueden ingerir diluida en agua.
La madre también ha sostenido siempre que un par de chaquetas para esquiar fueron encontradas en su habitación, pero él había llegado a ese hotel sin equipaje. Los resultados de la autopsia practicada al escalador italiano, que murió a los 34 años fue de sobredosis de cocaína y el forense descartó que se hubiera querido suicidarse.
Por la muerte del campeón del Tour de Francia y del Giro de Italia en 1998 fueron condenadas cuatro personas por haber proporcionado droga a Pantani y se les acusó de homicidio imprudente, pero posteriormente uno de ellos, Fabio Carlino, fue absuelto. Los otros imputados en el caso, los traficantes Fabio Miradossi y Ciro Veneruso y el peruano Ramírez Cueva pactaron penas que iban desde los cuatro años y diez meses al año y once meses.