La mujer que provocó una caída en la primera etapa del Tour de Francia que afecto a decenas de ciclistas por hacerse una foto mientras sostenía una pancarta ha sido arrestada y puesta bajo custodia policial en Landerneau, región al noroeste de Francia, según ha informado la cadena de televisión alemana RTL.
La espectadora, que se dio a la fuga, estaba en búsqueda y captura desde el domingo, cuando la gendarmería de Finisterre anunció la apertura de una investigación judicial por "lesiones involuntarias con incapacidad no superior a tres meses por violación manifiestamente deliberada de una obligación de seguridad o prudencia".
"La espectadora se arriesga a un año de prisión, hasta 15.000 euros de sanción y se le podría prohibir la asistencia a carreras ciclistas en un futuro", añadió en un comunicado la propia gendarmería.
Una pena que podría ser superior si alguno de los ciclistas implicados decide denunciar a la espectadora. Marc Soler, el corredor de Movistar que tuvo que retirarse del Tour por las lesiones derivadas de este incidente, ha asegurado este miércoles en La Vanguardia que está meditando "denunciar a la aficionada, porque siento mucha rabia”.