El matrimonio Real Madrid-competición europea continúa en su máximo esplendor. El conjunto que dirige Carlo Ancelotti se ha alzado este miércoles 10 de agosto con la Supercopa de Europa tras batir por 2-0 al Eintracht de Frankfurt.
Los goles de David Alaba en la primera parte y de Karim Benzema en la segunda han sido valedores del primer título de la temporada. De esta manera, los merengues dan un paso más para alzarse con el que sería su primer sextete.
El Madrid golpeó primero
El partido comenzó como estaba previsto: un Real Madrid bien asentado en el campo, haciendo gala de su condición de favorito, ostentando gran parte de la posesión. El Madrid era dueño y señor del balón. No obstante, el Eintracht no se iba a amilanar y esperaría a que los blancos perdieran el balón para montar eléctricos contragolpes a la espalda de la defensa merengue.
A pesar de parecer un partido entre David y Goliath, sería el equipo germano el que gozaría de la primera ocasión clara de gol. Un error de Ferland Mendy, quien se durmió con el balón en los pies, permitió a Santos Borré 'birlarle' el esférico para dirigir un pase para plantar a Kamada solo ante Thibaut Courtois. Para mala fortuna de los alemanes, el atacante japonés se ahogó en un mar de dudas y chutó escogiendo la peor de las opciones para él y la más sencilla para el portero del Real Madrid. Primer aviso del Eintracht.
Pero esta primera ocasión clara del partido no cambiaría la hoja de ruta del Real Madrid, que seguía dominando. Además, para fortuna de los de Ancelotti, Luka Modric cada vez iba adquiriendo más protagonismo en el encuentro, cuya creciente influencia comenzó a favorecer a su equipo, el cual empezó a crear rápidas transiciones que permitirían a sus atacantes situarse con mayor facilidad ante el cancerbero del Eintracht.
Tanto va el cántaro a la fuente, que tras una fugaz galopada del 'Pajarito' Valverde por la banda derecha, el cual filtró un pase al área rival que recibió Benzemá, quien rápidamente soltó el balón hacia Vinicius. El extremo brasileño disparó raso al palo largo, pero se interpuso el defensa del club germano.
Tras esta clara ocasión, ambos equipos se midieron. No obstante, el conjunto que dirige Carlo Ancelotti seguiría llevando la batuta del encuentro.
Tal era el dominio que en el minuto 36, Toni Kroos botó un córner al corazón del área germana, el cual fue cabeceado por Benzemá, pero el balón no cogió portería al estar rodeado de defensores. Sin embargo, Casemiro salvaría el saque de puerta con un inteligente cabezazo atrás en la misma línea de fondo para asistir a David Alaba, el cual se encontraba en el área pequeña y solo tuvo que empujar el esférico al fondo de las mallas. Cuarto gol de Alaba en 47 partidos vistiendo la zamarra madridista.
Este gol le hizo mucho daño al equipo francfortés, el cual se limitó a tratar de zafarse de los incisivos ataques del Real Madrid. Con esta tónica acabarían los primeros 45 minutos: un Madrid dominador y un Eintracht asediado.
Benzema sigue liderando al Madrid
En los primeros compases de la segunda parte, el conjunto alemán salió con una mentalidad muy diferente a la mostrada en el primer tiempo. Los de Oliver Glasner se mostraron mucho más rocosos y con una alta presión que iniciaba desde su delantero Santos Borré. Sin embargo, el Madrid seguiría dominando el balón.
Los de Ancelotti se acercaban cada vez más y con mayor peligro a la portería rival, hasta que en el minuto 60, Casemiro estrelló la pelota en el travesaño tras un potente disparo con la diestra. Fue la primera advertencia del club merengue en la segunda mitad, que se encontraba más y más cómodo conforme pasaban los minutos.
El Madrid tocaba y tocaba, y el Eintracht se limitaba única y exclusivamente a 'verlas venir'. Ya en el minuto 64, tras una posesión larga, el balón le llegó a Vinicius, el cual filtró un pase a la media luna para que de primeras Karim Benzemá rematara para hacer subir el 2-0 al marcador, acercando un poco más la Supercopa de Europa al conjunto blanco.
Este gol hizo mucho daño al equipo alemán, el cual tras encajarlo bajó los brazos y trató de que los minuros pasaran los más rápido posible para que su calvario en esta final acabara. El Madrid sigue reinando en Europa.