Barcelona y Real Madrid se jugarán la Liga en la última jornada. El Atlético de Madrid, flamante finalista de Champions, perdió el tren en el último momento, al caer inesperadamente ante el único equipo que ya está descendido a Segunda División: el Levante. Los de Simeone cayeron por 2-1 pese a que se adelantaron en el marcador en el minuto 2 por medio de Fernando Torres. Los 'colchoneros' se mostraron conformistas y dieron vida a un rival que quiso despedirse de Primera ante su parroquia con una victoria.
Esto provoca que el duelo por el título se centre en el Real Madrid y el Barcelona. Los culés liquidaron con una goleada el trámite ante el Espanyol, que se mostró más feroz que competitivo. Muchas patadas a destiempo y muchas faltas al borde del área. Precisamente en una de ellas Lionel Messi abrió la lata y dio tranquilidad a la grada culé, que después vio cómo sus jugadores desarbolaban a un Espanyol que confirmaba su mala temporada con esta dura derrota en el Camp Nou. Suárez, en dos ocasiones, Rafinha y Neymar completaban la goleada y acercan al Barcelona a un título que tendrán que ganar en Granada, donde se enfrentarán a un rival que ya se ha ganado la permanencia con su victoria en Sevilla.
Quien se ha metido en la pelea por el título viniendo desde atrás es el Real Madrid, que sufrió de lo lindo para doblegar a un Valencia (3-2) que lanzó a los palos dos veces y que obligó a Kiko Casilla a emplearse a fondo. Los madridistas se miden también a un adversario, el Deportivo en Riazor, que ya ha cerrado su permanencia en Primera. Los madridistas llegan un punto por debajo de los azulgrana, pero confían en devolverle a los culés los dolorosos episodios de Tenerife. Mientras el Atlético se despedirá ante el Celta en el Vicente Calderón con la cabeza puesta en la final de la Champions en San Siro. Por una vez, no habrá partido a partido para la parroquia rojiblanca.