El Madrid se ha puesto el traje de favorito y pega cada semana buscando noquear rivales. El Atlético esta semana ha aguantado el envite, pero el Barcelona se desintegra lentamente. Era el rival más tenido, pero igual ahora, con la temporada como se está desarrollando, el título empieza a ser una guerra local. Dentro de quince días acudirá el equipo de Martino al Bernabéu. Se afilan los cuchillos en Chamartín, huelen el miedo del rival y piensan en una victoria que les eliminaría de la Liga. Los más soñadores piensan en una goleada.
No siempre fue así. Al Madrid le costó encontrar la tecla en el inicio de la temporada, pero con el desarrollo del campeonato Ancelotti encontró tanto el dibujo como los hombres llamados a desarrollarlo. Hoy los blancos son un equipo muy eficaz, bien construido y, a ratos, muy brillante. Hablar de la calidad de un equipo con el presupuesto del Real Madrid parece una perogrullada, pero ha habido mucho tiempo en el que el talento se supeditaba a otras cuestiones. La ventaja con el Barcelona es ya de cuatro puntos, una enormidad si se tiene en cuenta que llegó a estar siete por detrás de los azulgranas. Las sensaciones, más allá de la cifra concreta, son claramente positivas para los blancos.
Ancelotti intenta bajar un poco las expectativas y se aferra al partido a partido, manido tópico que los entrenadores no olvidan nunca. “El riesgo es pensar demasiado. Tenemos que estar preparados todos los partidos, cada uno puede ser el más importante de la temporada. La Liga es larga y el objetivo es llegar así al último encuentro”, comentó, para después afirmar que el campeonato es una carrera “una carrera hasta el último partido, hasta el último minuto”.
Gira el Madrid alrededor de Modric, que es el que mejor entiende los ritmos del fútbol. Velocidad cuando se necesita, pausa si lo requiere el partido. No falla un pase, y eso que no se puede decir que no arriesgue con el balón. A su alrededor tiene atletas como Cristiano, que ayer voló en el primer tanto o malabaristas como Marcelo, brillante en la definición del segundo. Sólo Bale parece desafinado.
El equipo funciona, sobre todo cuando el miedo no se acerca por el banquillo. Tuvo Ancelotti un momento de flaqueza antes del derbi, quiso asegurar más y puso en el campo su juego de laterales defensivos. Error demostrado, tanto en el propio partido como en el resto de la temporada. Una de las claves del Madrid es que, como hacen los grandes equipos, defiende muy bien porque no concede mucho balón. La función de Carvajal y Marcelo, de nuevo enormes frente al Levante, es jugar muy bien al fútbol para que el rival no la huela. Los datos están ahí, este Madrid marca mucho, sí, pero también encaja muy poco. En el 3-0 a los blancos le salió bien hasta la amarilla a Ramos. El central la forzó para jugar el clásico. Esta vez no fallo (aún parece increíble que se pueda errar en eso).
Sólo hubo un momento de nervios, casi al final, cuando Carvajal salió dolorido del terreno de juego. Se temía que fuera algo grave, pues el canterano se ha asentado en la posición y es uno más dentro de la constelación blanca. Pero no, un pinzamiento en la cadera que es prácticamente nada. Carvajal es uno de los cambios más radicales del equipo, ataca bien, defiende bien, abre la banda derecha y no pierde la cabeza. Un jugador soberbio en la posición en la que el equipo tenía menos calidad en los años previos. Y así, con todo correcto, el Madrid celebra un estado de mayúscula felicidad.
Ficha técnica:
3 - Real Madrid: Diego López; Carvajal, Varane (Nacho Fernández, m.69), Sergio Ramos, Marcelo; Xabi Alonso, Modric (Isco, m.74), Di María; Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema (Jesé, m.81).
0 - Levante: Keylor Navas; Vyntra, David Navarro, Juanfran, Nikos Karampelas; Pedro López, Pallardó (El Adoua, m.69), Sissoko, Sergio Pinto (Nagore, m.74), Ivanschitz; y David Barral (Ángel, m.87).
Goles: 1-0, m.11: Cristiano Ronaldo. 2-0, m.49: Marcelo. 3-0, m.80: Nikos en propia puerta.
Árbitro: Iglesias Villanueva (colegio gallego). Amonestó a Sergio Ramos (53), Di María (57) por el Real Madrid; y a Vyntra (58), Pallardó (62) por el Levante. Expulsó por roja directa a David Navarro en el minuto 63.
Incidencias: encuentro correspondiente a la 27a jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante la presencia de 74.272 espectadores.
