En su afán por seguir dando visibilidad al rugby y a la ciudad, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, declaró hace unos días que no descartaba ofrecer el estadio José Zorrilla para que se dispute la final de Liga, en el caso de que lleguen los dos equipos de Valladolid. Después del éxito de la final de Copa, en la que se 26.000 aficionados llenaron las gradas del estadio, ahora podría repetir en la final liguera.
El problema es que no sabrá si los dos equipos de Valladolid están clasificados hasta siete días antes. De ahí que en la capital vallisoletana se haya comenzado a barajar la opción de organizar una Final Four que celebrar las semifinales el jueves o viernes, y la final el domingo. Eso aseguraría la participación de los dos equipos vallisoletanos, que ya están clasificados para esa ronda al hacerse con los primeras plazas en la temporada regular. El inconveniente es que los jugadores no dispondrían del tiempo habitual para recuperarse físicamente. Mientras que los cuartos se jugarán el 15 de marzo, la semifinal está prevista el día 22 y la final el día 29 de mayo.
A favor está que la fórmula ya se utilizó en la Superibérica, disputada en 2009 en el campo de Vallecas. Entonces se jugaron las semifinales el viernes y el domingo por la tarde se disputó la final, que ganó la franquicia madrileña de los Gatos. El problema es que las plantillas de los clubes no tienen la profundidad de aquellas franquicias regionales. Puente está dispuesto a seguir apoyando al rugby y Valladolid quiere convertirse, de facto, en la capital oficial del rugby español. Habrá que seguir la evolución de los acontecimientos y ver si esta idea vuelve a cristalizar como en la Copa. De momento en las redes ya se habla de la iniciativa con el hashthag #SesionContinuaRugby