“Obviamente, tienes que manejar (pilotar) en la misma línea, a lo agresivo, a lo estúpido algunas veces”. Sergio Pérez no piensa cambiar. Ha sido el centro de las críticas tras el GP de Mónaco por su agresividad al volante por las calles del Principado y, según parece, seguirá siendo fiel a ese estilo.
"Ha sido una gran carrera. He adelantado muchos coches durante toda la tarde. Kimi (Raikkonen) no me dejó demasiado espacio cuando lo intenté sobrepasar a la salida del túnel. Me quedé sin sitio y choqué contra la 'chicane'. Es una pena", comentó Pérez.
El joven mexicano, de 23 años, sustituto de Lewis Hamilton en McLaren, no pudo concluir la prueba después de verse involucrado en un choque con el finlandés de Lotus. "Había adelantado a Jenson (Button) y a Fernando (Alonso), pero no pude evitar el choque con Kimi. Cualquier maniobra para adelantar es peligrosa en un circuito como es el de Mónaco, pero un piloto tiene que dejar un poco de espacio al otro", afirmó Checo culpando de su percance a Raikkonen.
"Es frustrante cuando te retiras de un gran premio después de haber corrido tan rápido y tan bien; especialmente cuando estás tan cerca del final. Estoy muy decepcionado, tanto por el equipo, como por mí", añadió Pérez, duramente criticado por pilotos como Raikkonen, Alonso o su compañero de equipo, Jenson Button, por su conducción agresiva y temeraria.
El mexicano ni se inmuta. Todo lo contrario que Fernando Alonso, que fue tan claro como contundente: "Cuando luchas por ser undécimo o duodécimo en todas las carreras te lanzas a atacar. Él (Pérez) no pierde nada, pero yo pierdo puntos muy valiosos. En el GP de Baréin le fue bien, pero aquí (Mónaco) ha tenido que abandonar. Espero que esto le sirva como lección y así aprenda".
