El empresario chino Wang Jianlin, presidente del conglomerado inmobiliario y de entretenimiento Dalian Wanda y dueño del 20 por ciento de las acciones del Atlético de Madrid, se ha convertido en el chino más rico del mundo, con una fortuna de 40.000 millones de dólares (36.000 millones de euros), según la lista elaborada por la revista económica Hurun. Wang, de 61 años, ha superado al que durante mucho tiempo fue considerado el millonario más acaudalado de toda Asia, el magnate inmobiliario hongkonés Li Ka-shing.
El ascenso de Wang, dueño también del emblemático Edificio España madrileño, se debe principalmente al reciente aumento de la cotización de sus negocios en bolsa. Por ejemplo, su cadena de salas Wanda Cinema, una de las mayores del mundo, ha aumentado por cinco el valor de sus acciones desde que empezaron a cotizar en la Bolsa de Shenzhen, en enero. Conviene destacar que Wang ya llevaba varios años siendo considerado el hombre más rico de China, pero no en cambio el chino más rico del mundo, ya que muchos magnates de esa etnia han tenido su domicilio en otros territorios (sobre todo Singapur, Taiwán, Macao o Hong Kong, estas dos últimas bajo soberanía china pero independientes del régimen de Pekín en materia económica).
Li Ka-shing, de 87 años, presidente del gigante inmobiliario Cheung Kong y de Hutchison Holdings, ostentó ese honor durante más de 15 años, con una fortuna de 31.000 millones de dólares (28.000 millones de euros), casi desde que Hurun iniciara en 1999 la elaboración de esta lista. En tercer lugar en ella se sitúa ahora Jack Ma, presidente de la compañía de comercio electrónico Alibaba, con bienes por valor de 25.000 millones de dólares (23.000 millones de euros). La lista incluye a 1.577 empresarios de 18 países, entre ellos 302 que no viven en territorio chino, y que entre todos suman una fortuna de 1,98 billones de dólares (1,78 billones de euros), comparables al producto interior bruto de Rusia.