Nos guste o no nos guste, con el paso de los años nuestra piel va perdiendo luminosidad y comienzan a aparecer las primeras manchas y arrugas, es definitiva, la piel va envejeciendo. Aunque es ley de vida, a todos nos gusta mantenernos jóvenes el máximo tiempo posible y nos puede llegar incluso a obsesionar retrasar ese temido momento todo el tiempo que se pueda.
Tenemos una mala noticia: es imposible parar el paso del tiempo. No hay que desanimarse porque, aunque no podamos detener lo inevitable, si que podemos retrasar el envejecimiento. ¿Cómo lograrlo? Hay diferentes factores que influyen en que nuestra piel empiece mostrar el paso de los años, uno de los más fuertes es la genética, pero más allá de ella existen una serie de factores determinantes y a los que podemos hacer frente con una rutina de cuidados correcta.
El inicio del otoño es un momento perfecto para marcarnos como objetivo elegir esa rutina de belleza que nos hará frenar el envejecimiento de la piel. No existe un sistema infalible que sirva para todo el mundo, por ello el primer paso que tienes que hacer es conocer bien tu piel, saber de qué tipo es, clasificarla y saber los cuidados que precisa. Además tienes que ver si, más allá de la aparición de las arrugas y manchas, inevitables para todos, tienes que luchar contra algún otro tipo de problema estético como el acné, las ojeras o la flacidez.
Una buena manera de llegar al éxito es ponernos en manos de profesionales por lo que no dudes en solicitar cita con especialistas en estética o pedir consejo en tu farmacia de confianza donde pueden ayudarte más de lo que te puedes imaginar. Después llega el turno de ir de compras, adquiriendo los cosméticos necesarios para poder cumplir con la rutina de belleza personalizada que hemos elegido.
Una de las claves es ser constante
Para terminar, un truco final. Es difícil asimilar una rutina diaria desde cero, sobre todo si tenemos que hacer uso de diferentes productos y no todos ellos diarios. Por ello te recomendamos realizar algún tipo de tabla, listado o calendario que te sirva de "chuleta" para que no se te olvide qué es lo que toca cada día. Ten siempre presente lo siguiente: una de las claves para poder retrasar el envejecimiento es ser constante.
Cinco pasos para frenar el envejecimiento
Poniendo en práctica nuestro propio consejo, desde Vozpópuli también hemos querido ponernos en contacto con una experta para que nos dé los cuidados que tenemos que realizar de manera constante para conseguir nuestro objetivo. Para la farmacéutica Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia, bastaría con llevar a cabo cinco pasos para frenar la aparición de los signos de envejecimiento en nuestra piel:
1) La hidratación
Realizar una buena hidratación es fundamental para aportar el agua que necesita la piel. Gracias a este paso podrá mantener su barrera hidrolipídica suficientemente firme. ¿En qué se traduce eso? La piel será más fuerte y resistente, estará más preparada para luchar contra la agresión de agentes externos y, en resumen, envejecerá más tarde.
Para realizar una buena hidratación necesitamos una buena crema hidratante. También podemos añadir otro producto, por ejemplo un sérum hidratante, sobre todo si tenemos una piel seca o madura.
2) Los antioxidantes
Los antioxidantes pueden ser unos aliados de primera en nuestra guerra contra el envejecimiento. Su estrategia principal es defender la piel de los agentes externos ambientales, por ejemplo la contaminación, que agreden la piel acelerando de manera prematura su envejecimiento al producir la aparición de arrugas y manchas o una pérdida de luminosidad.
Los antioxidantes se deben utilizar por la mañana, después de haber limpiado bien la piel. Uno de los más aconsejables, por su éxito probado, es la vitamina C con ácido ferúlico.
3) La protección solar
¿Sabes cuál es el principal responsable del envejecimiento de la piel? La respuesta correcta es el sol. Seguro que sabías que los rayos solares provocan manchas, pero su acción negativa va mucho más allá porque producen una sequedad en la piel que favorece la aparición de las arrugas.
Se recomienda usar protección solar durante todo el año, no sólo en verano que es cuando somos más conscientes del sol, su acción sigue estando presente el resto de meses. También tienes que tener en cuenta que no sólo hay que proteger el rostro, sino las zonas que vayan a estar expuestas. Un área súper importante de cuidar con fotoprotectores son las manos, donde la aparición de manchas y la pérdida de elasticidad pueden reflejar tu verdadera edad.
4) El contorno de ojos
La piel del contorno de ojos es la más fina y, por eso mismo, la primera en envejecer. No sólo es delicada, sino que también es la que más trabaja ya que no paramos de parpadear en ningún momento por lo que está en constante movimiento. Por estas razones es importante que empecemos a cuidarla pronto ya que es una zona muy proclive a los signos de cansancio, como las bolsas o las ojeras, que con la edad se van multiplicando.
El contorno de ojos hay que aplicarlo de una forma suave, por eso es importante hacerlo con el dedo anular ya que es el que ejerce la presión perfecta para esta zona. Otra de las claves que tenemos que tener en cuenta es que el contorno no es sólo la parte de las ojeras, también está la zona superior. Si queremos prevenir la flacidez y lo que suele denominarse "párpado caído", no dejaremos de usar el contorno alrededor de todo el ojo.
5) Los activos transformadores
Por la noche es muy aconsejable usar activos transformadores como ácidos y retinoides, que favorecen la renovación celular. Según el tipo de piel y la necesidad específica podemos elegir los AHA que se pueden usar en noches alternas o seguidas, en la medida que la piel los tolere. Los BHA son otra alternativa que tienen una mejor tolerancia porque penetren más lentamente que los anteriores.
También podemos utilizar retinoides, que son el activo más preciado en belleza por sus rápidos resultados para combatir las manchas, las marcas o las arrugas, o despigmentantes si las manchas de nuestra piel son muy visibles.
¿A partir de qué edad hay que usar cremas antiedad?
La farmacéutica Rocío Escalante lo tiene claro: “no me gusta hablar de edades ya que dependiendo de los cuidados que haya tenido una piel de joven así irá madurando". Lo que sí que es objetivo es que a partir de los 25 años la producción de colágeno va disminuyendo pero influyen otros factores como que se haya tomado el sol sin protección o episodios de acné que harán que se necesite usar cremas antiedad antes de tiempo.
La genética ayuda, pero no tanto
Preguntándole por una recomendación final, la experta decide darse un consejo a si misma cuando era joven: “el consejo que me daría a mí yo de hace 20 años sería que se pusiera más protección solar, las radiaciones son las responsables del 80% del envejecimiento. La genética ayuda, pero no tanto, y antes o después empezaran a aparecer las manchas y las arrugas, signos que envejecen muchísimo el rostro. Hay mucha diferencia entre una arruga de la edad y una provocada por el sol”.
¿Cuántos de los cinco pasos imprescindibles cumplías en tu rutina diaria de belleza? ¿Vas a aprovechar el cambio de estación para ponerte más en serio con el cuidado de tu piel?
