Feliz, tranquila y lo más discreta posible. Así es la nueva vida de la infanta Cristina quien, tras firmar su polémico divorcio con Iñaki Urdangarin a finales del pasado año, centra su día a día en su trabajo, sus amigos y, por su puesto, su familia. A pesar del disgusto que se llevó tras hacerse pública la relación de su hija Irene con Juan Urquijo, la hermana del rey Felipe VI disfruta de la apacible vida que tiene en Ginebra, donde tiene intención de seguir viviendo. Sin embargo, no duda en viajar a España para ver a los suyos.
Así lo hemos podido ver en numerosas ocasiones, cuando la infanta Cristina ha viajado a Barcelona para asistir a los partidos de su hijo Pablo Urdangarin, o a Madrid, para reencontrarse con su madre, la reina Sofía, o para asistir a importantes actos familiares, como la reciente boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo, o la misa funeral celebrada por Fernando Gómez-Acebo. Dos citas en las que, además, pudo reunirse con su padre, el rey Juan Carlos, a quien aseguran que está muy unida.
Eso sí, donde no la hemos podido ver por el momento es en Sanxenxo, localidad a la que el rey emérito viaja ya con asiduidad, y donde está previsto regrese en los próximos días. Una nueva visita para participar en la regatas, a la que sí está previsto que se una la infanta Elena, aunque no la infanta Cristina, quien tendría un motivo de peso para no reencontrarse con su padre en tierras gallegas.
La infanta Cristina no viaja a Sanxenxo para ver al rey Juan Carlos por un motivo de peso
Tal y como han confirmado desde su círculo más cercano, el rey Juan Carlos tiene previsto llegar a Galicia la próxima semana, para asistir a las regatas que se celebran los días 17, 18 y 19 de mayo. Una competición en la que espera participar a bordo del Bribón, tras no poder hacerlo durante su última visita por un resfriado, un problema de salud que “preocupó a su entorno familiar más cercano”, señala su entorno a ‘Monarquía Confidencial’.
Según explican al citado portal, “el plan del Emérito ahora apunta a que va a ser tranquilo y en familia”. Una postura que le lleva a salir lo justo y necesario de la casa de su amigo Pedro Campos donde se aloja, “con el fin de evitar fotografías de la prensa y posibles comentarios que perjudiquen su estancia allí”.
Además, está previsto que la infanta Elena se una a él durante esta visita: “Ambos pernoctarán en casa de su íntimo amigo Pedro Campos. Por ese motivo, y como ya es habitual, la hija de Campos abandonará ese fin de semana el domicilio familiar para facilitar a don Juan Carlos y a la Infanta el hospedaje”.
Quien no estará en Sanxenxo será la infanta Cristina, aunque no por falta de ganas. Al parecer, la hija del Emérito ha decidido no viajar a Galicia, precisamente por los problemas de alojamiento. Así lo apuntan fuentes cercanas al rey Juan Carlos, que señalan que la hija del Emérito “prefiere no viajar a la localidad gallega para evitar más trastornos familiares en la casa de Campos”.
“Cristina prefiere ver a su padre en otros ámbitos, para no ser demasiados familiares en la casa del presidente del Club Náutico”, señalan al medio. Y es que, si la infanta Cristina viajara a Sanxenxo, “obligaría a buscar para ella un hospedaje en la zona, lo que, además, complicará el trabajo del equipo de seguridad que se envía desde La Zarzuela”.
Tal y como señalan desde el entorno del rey emérito, aunque la infanta Cristina cuenta con su propia escolta, “las estancias de don Juan Carlos a Sanxenxo obligan a enviar un par de equipos de La Zarzuela con él, por lo que el hecho de que se desplacen más familiares, “obliga a un refuerzo del dispositivo de seguridad de la Casa del Rey”.
Así, y con el fin de evitar dichas complicaciones, la infanta Cristina habría decidido no viajar a Sanxenxo los próximos días, donde sí está previsto llegue la infanta Elena para acompañar a su padre.