Aunque siempre discreto con todo lo relacionado con su vida privada, Jordi Cruz ha desvelado todos los detalles de su próxima boda con Rebecca Lima. Un enlace que tendrá lugar en la Costa Brava el sábado 24 de agosto, apenas unos días después del primer cumpleaños de su hijo Noah.
“Es el fruto de nuestra relación y el gran protagonista de nuestras vidas. Justo días después de su primer cumpleaños y su bautizo, celebraremos nuestro amor y su vida” ha señalado el prestigioso chef y jurado de televisión en una entrevista concedida a la revista ‘¡Hola!’ en la que junto a la empresaria brasileña posa junto a su hijo.
La triple celebración en la boda de Jordi Cruz y Rebecca Lima: en la cosa Brava y con un exclusivo menú
Han pasado casi seis años desde que Jordi Cruz y Rebecca Lima se conocieran a través de una amiga en común. Una relación que comenzó a miles de kilómetros de distancia y que el próximo 24 de agosto la pareja celebrará con sus amigos y familiares.
Tal y como ha confirmado el chef, la boda, que será una ceremonia religiosa, tendrá lugar en el Convento de Blanes, un espectacular enclave frente al mar, a 70 kilómetros de Barcelona, en que los novios celebrarán tanto su amor, como el cumpleaños y bautizo de su hijo Noah.
Salvo pequeños detalles, los novios tienen ya todo listo para el gran día. Algo para lo que han contado con ayuda. “Hay que decir que sin Claudia Rubio, nuestra ‘wedding planner’, eso no hubiera sido posible” señala Rebecca Lima en la entrevista, donde también confiesa estar muy nerviosa: “Estoy tan nerviosa que no puedo conmigo misma. Llevo días sin dormir, me hace mucha ilusión y quiero que todo salga bien”.
Unos nervios que Jordi Cruz intenta mantener a raya, y una de las formas ha sido delegando la parte gastronómica. “La única forma de estar totalmente relajado ese día es pasar toda la responsabilidad a otro cocinero, y creo que he elegido al mejor para ello” señala.
Así, será el Nandu Jubany, chef reconocido con una estrella Michelin, el encargado de elabora el menú de la boda. “Un menú elegante, singular, factible y que esté muy rico” apunta Jordi Cruz, que señala: “He cocinado muchas bodas en mi vida y sé lo que funciona y lo que no funciona, y si a eso le añadimos el buen gusto de Becca y su capacidad para montar fiestas divertidas y maravillosas… Pienso que nos quedará una fiesta espectacular, gastronómica y muy bonita”.
Los famosos invitados a la boda: de Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez a concursantes de ‘MasterChef’
Como es de imaginar, los novios estarán acompañados en su gran día por sus amigos y familiares. Una boda que aunque pretendían que fuera algo pequeño, finalmente será mayor: “Queríamos una boda íntima y familiar, pero poco a poco se ha convertido en algo más, en una gran celebración. No será una boda multitudinaria, seremos unos 180”.
Entre los invitados estará la familia de Rebecca, que viajará desde Brasil, y el entorno de Jordi Cruz. “Quiero tener a la familia, a las personas que han sido importantes en mi vida, tanto a nivel profesional como personal, y también aquellas personas que han logrado sacar lo mejor de mí” señala el chef, que confirma que entre los invitados, habrá varios rostros conocidos.
“¡Pepe y Samantha saben que no les queda otra!” asegura refiriéndose a Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera, sus compañeros en ‘MasterChef’. “Evidentemente, habrá algunos cocineros, no todos, porque sería imposible. También personas singulares que he conocido en estos últimos años y me parecen geniales para pasar un día tan especial”.
Personas como algunos de los concursantes del reconocido programa de televisión, que incluso tendrán un papel importante. “Un papel muy especial lo tendrá Fray Marcos, exaspirante de ‘MasterChef’ y persona a la que le prometí que si, un día me casaba, él oficiaría la boda. La fiesta está pensada para la que la gente disfrute, incluso vamos a quitar los móviles para que se centren solo en pasarlo bien. A partir de ahí, si Pitingo se anima a cantar unas canciones, será maravilloso”.
Pelosi
Hortera…
D.K
Tenéis razón, Morán es Morán pero la verdad es que me he reído. Un abrazo Escher