Mila Ximénez y su exmarido Manolo Santana, de 82 años, no lograron arreglar sus diferencias antes del fallecimiento de la colaboradora, ocurrido el pasado miércoles. La pareja se casó en 1983, un año después tuvieron a la única hija que tuvieron en común, Alba Santana, y poco tiempo después, en 1986, se divorciaron.
Desde entonces su relación fue muy complicada y difícil. Incluso en los últimos años, Manolo Santana tampoco se hablaba con Alba, la hija que tuvo con Mila Ximénez. Desde el fallecimiento de la comunicadora, todo el mundo estaba pendiente de la reacción del exdeportista, del que se dijo que desconocía la muerte de su ex, pero no era verdad. De hecho, fue de los primeros en enterarse, a través de las llamadas y mensajes de periodistas que querían conocer su parecer de primera mano.
Santana no contestó y no planea hacerlo. A pesar de eso, no se esconde. De hecho, tal como ha sabido Vozpópuli, aparecerá el 1 de julio en un bolo en Marbella.
Manolo Santana no se esconde tras la muerte de Mila Ximénez (a pesar de su silencio)
Este 1 de julio en Marbella se celebra un evento al que acudirá Manolo Santa como invitado de honor junto al chef de tres estrellas Michelin Dani García y el actor y presentador Carlos Sobera, que irá acompañado de su mujer Patricia Santamarina.
El evento en cuestión lo organiza EGoGames, la plataforma eSports líder en Europa que ha unido fuerzas con Global Gift creando el movimiento “Gaming for Global Gift” a beneficio de Casa Ángeles, que estará representada por Alonso Maravilla, Mateo Conde y Alejandro Sáez. Al acto también asistirán la alcadesa de Marbella, el concejal del Ayuntamiento de la ciudad y numerosos rostros políticos más.
Manolo Santana, de esta forma, y a pesar de no haber hecho ninguna declaración, deja claro que la vida sigue y que él no se va a esconder tras la muerte de Mila Ximénez, quien, por cierto, siempre habló pestes de él.
Se estima que Santana acudirá a la cita con su esposa, la sudamericana Claudia Rodríguez, su inseparable desde 2013.
Manolo Santana y Mila Ximénez, un matrimonio repleto de desengaños
En 1986, Manolo Santana y Mila Ximénez tomaron caminos separados. Ella llegó a reconocer años después que fue la peor época de su vida, ya que dejó a su hija Alba con el padre –y con su mujer de entonces, Otti Glanzielus– porque no tenía dinero para cuidarla. Haber tenido que dejar a su pequeña fue algo que le estuvo atormentando toda la vida, aunque más tarde se reconciliaron.
En aquella época, además del drama de haber renunciado parcialmente a su hija, se unió que Manolo no la dejaba verla: "Santana hizo una venganza contra mí. Me han humillado. Me han jodido. Como tenista, será un gran tenista, pero como persona es un desecho. Para mí es muy complicado".
Mila desveló también que su matrimonio estuvo lleno de altibajos, desengaños e infidelidades desde el primer momento: "Me enteré de que tenía otra hija a los tres meses de casarme, de lo mío a los otros tres meses. Ha sido un vapuleo continuo. ¿Por qué me quedé? Yo me quería ir cuando nació Alba, ya en el hospital, hablé con el abogado, pero, ¿qué sucede? Muere un hermano de Manolo de un infarto y entiendo que no me puedo ir en ese momento y ahí me equivoqué. Este episodio le hizo peor persona todavía. Vivir con él era un absoluto infierno", tal y como te contamos en Vozpópuli.
Una vida tranquila junto a Claudia Rodríguez
Manolo Santana nunca entró en este tipo de polémicas. Mila Ximénez formaba parte de su pasado y no se espera que se pronuncie acerca de su fallecimiento. Ahora, el extenista se encuentra viviendo tranquilo con su esposa, la colombiana Claudia Rodríguez, con quien lleva desde 2003. Su matrimonio siempre ha estado cuestionado por todos, sobre todo por la diferencia de edad que hay entre ellos.