Con poco más de 4.000 electores, Mojácar acapara desde hace días la atención de todo el país. La detención de siete personas, al menos dos vinculadas al PSOE, por una operación contra la compra de votos para las elecciones del próximo domingo ha centrado toda las miradas en esta localidad almeriense. Aunque no es la primera vez. Desde hace horas, son muchos los que recuerdan el estrecho vínculo que une al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a su familia, con este bonito pueblo en el que disfrutaron de sus vacaciones durante décadas.
Aunque desde 2018, año de la investidura de Pedro Sánchez tras la moción de censura a Mariano Rajoy, las vacaciones familiares de la familia Sánchez cambiaron radicalmente, optado por Doñana o Lanzarote para sus veranos, Mojácar fue el destino favorito del presidente del Gobierno desde su juventud.
El vínculo especial de Pedro Sánchez con Mojácar, donde tiene una casa
Fue en el año 2001 cuando, tras años disfrutando de sus vacaciones familiares en Mojácar, donde comenzó a veranear con su tío, Pedro Sánchez compró una casa. Aseguran que el político sentía pasión por esta localidad donde decidió invertir. Así, adquirió un apartamento en el Victoria Building, un edificio encastrado en la ladera de una montaña construido en el año 2000 sobre lo que anteriormente había sido el emblemático Hotel Mojácar, que había cerrado años antes sus puertas al público.
Aseguran que Pedro Sánchez consiguió una ganga con la compra de uno de estos modestos apartamentos, ubicados en pleno centro urbano, en una urbanización con bonitas vistas al pueblo, a poco más de dos kilómetros de la playa y con gimnasio y jacuzzi en las zonas comunes. Una vivienda de 72 metros cuadrados con dos habitaciones, salón-cocina y un cuarto de baño por la que aseguran pagó 120.000 euros.
Durante años, Pedro Sánchez, su mujer, Begoña Gómez, y sus dos hijas, Ainhoa y Carlota, disfrutaron de la tranquilidad de esta localidad por donde se dejaban ver en sus calles, sus playas y su gente. Y es que, tal y como aseguran en Mojácar, el político hizo allí grandes amigos. Entre ellos los propietarios del chiringuito Aku-Aku, donde el matrimonio pasaba gran parte del tiempo disfrutando de sus apreciadas paellas. Tal y como apunta el diario ‘El Mundo’, María Flores, dueña del establecimiento, forma parte de la lista del PSOE para las elecciones municipales.
Sin embargo, a partir de 2018, las vacaciones de la familia Sánchez cambiaron radicalmente. Poco después de su nombramiento como presidente, Pedro Sánchez recibió un informe del Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno en el que se desaconsejaba (por no decir prohibía) que ese año veranara en Mojácar, alegando cuestiones de seguridad, según publicó por entonces ‘La Voz de Almería’.
Desde entonces, tal y como han apuntado varios vecinos de la localidad, no ha habido rastro del presidente de Gobierno por allí, aunque, hasta donde se sabe, sigue contando con el apartamento en propiedad, tal y como aseguró el año pasado un vecino a ‘El Español’: “La casa sigue siendo de su propiedad, pero hace mucho tiempo que no se ve ningún tipo de movimiento en ellos. El apartamento, hasta donde sé, pasa cerrado la mayor parte del año”.
Mojácar fue, durante muchos años, el refugio de Pedro Sánchez. Y no solo el destino para veranear con su familia. Allí se refugió en 2016 tras su derrota electoral frente a Mariano Rajoy. Así lo supimos cuando un tuitero anónimo inmortalizó la que hasta la fecha es la última imagen del presidente del Gobierno en la localidad almeriense. Una imagen junto a su mujer, Begoña Gómez, disfrutando de la tranquilidad de su chiringuito favorito.