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Protege tu pelo de las agresiones del verano siguiendo los consejos más eficaces

Si quieres terminar el verano sin que tu pelo haya sufrido sus consecuencias, es hora protegerlo a diario del sol y de otros agentes dañinos presentes en las playas y piscinas

  • Protege tu pelo de las agresiones del verano siguiendo los consejos más eficaces

Cuando llega el verano prestamos una dosis extra de cuidados a nuestra piel pero el pelo también sufre durante los meses más calurosos del año. Es en la época estival cuando el cabello puede deteriorarse de una manera más acentuada por la acción de los rayos UV que modifican su estructura y provocan deshidratación. Esto se traduce en una melena más áspera, sin brillo, apagada, quebradiza y con las puntas abiertas

¿Por qué sufre más el pelo en verano? Hay diferentes agresiones externas que afectan de manera negativa al cabello y que son propias de estos meses. En primer lugar la exposición directa al sol, el cuál es el causante también de otros elementos perjudiciales como el aumento de las temperaturas o el sudor. Además existen otros agentes externos que sólo aparecen durante el verano como la sal del mar o el cloro de las piscinas.

Son todas estas causas las que hacen que cuando llegue septiembre (y la vuelta a la rutina) no pueda faltar en nuestra agenda una visita urgente a la peluquería. Pero, como dicen las abuelas, más vale prevenir que curar, así que hoy en Vozpópuli te vamos a dar los mejores consejos para mimar tu pelo durante el verano y que cuando éste termine no se aprecien ninguna de las consecuencias de sus principales enemigos. 

Consejos para proteger tu pelo en verano

Para saber cómo debemos de cuidar el cabello y protegerlo de las agresiones externas durante el verano, hemos hablado con la doctora María Eugenia Segovia, experta en salud capilar de la clínica MC360 de Madrid. Para ella, la clave para tratar de evitar los efectos nocivos es tener en cuenta "los dos pilares básicos: la protección y la hidratación".

Protección frente al sol

El sol es uno de los grandes enemigos de la piel y del cabello en verano. “Exposiciones prolongadas podrán afectar a la zona del cabello que se llama tallo, que es la más sensible a las quemaduras, y se podrá dañar la queratina, que es la principal proteína del cabello”, comenta la Doctora Segovia. También puede afectar a la vitamina E y C presentes en el pelo, lo que podría provocar que se acabe deshidratando.

Mujer tomando el sol protegida por una pamela  

Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia, nos recuerda también que el sol oxida el pelo teñido y deteriora los pigmentos, modificando su color. Además, el cuero cabelludo puede sufrir deshidratación e incluso quemaduras en aquellas personas que tienen poca densidad capilar.

Poder combatirlo es bien sencillo, basta con utilizar algún tipo de gorra, sombrero o pañuelo para protegerlo, sobre todo si tenemos el pelo largo. Además la doctora nos recuerda que hay que “tomar el sol con precaución y evitando las horas centrales del día”.

Los protectores capilares nos otorgan una ayuda extra

También podemos recurrir a una ayuda extra que nos otorgan los protectores capilares. "Estos productos lo protegen del sol, el cloro y la sal del mar. Son fórmulas que no apelmazan el cabello, y que podemos usar en húmedo o seco, las veces que queramos. Yo aconsejo reaplicar siempre después de darse un baño." nos recomienda la farmacéutica Rocío Escalante. 

Cuidados al visitar las piscinas

El problema cuando acudimos a una piscina reside en el cloro y el sulfato de cobre que están presentes en el agua y que pueden afectar negativamente al estado de nuestro cabello llegando incluso a poder decolorarlo. Esto se debe a que el cloro provoca deshidratación y elimina los aceites naturales del pelo, mientras que en los cabellos teñidos puede llegar a degradar los pigmentos modificando o perdiendo el color habitual.

Mujer tomando el sol en una piscina

Para poder evitar estos resultados, la solución también es muy sencilla: basta con que enjuaguemos y aclaremos bien el pelo en las duchas después de darnos un baño en la piscina para eliminar cualquier resto de cloro o sulfato de cobre. 

Precauciones en la playa

Estas visitas a las duchas después de cada baño no es exclusivo de las piscinas, también tenemos que realizarlas después de bañarnos en el mar. Rocío Escalante nos señala que la sal del mar es la causante de resecar y deshidratar nuestro pelo ya que contiene un pH más alto que el del cabello. 

Pero no todo van a ser cosas negativas, la Doctora Segovia destaca los beneficios que podemos obtener para el pelo tras bañarnos en la playa: “En el caso de aquellas pieles que tengan tendencia a la dermatitis, podrán calmar las irritaciones y en aquellos cabellos que tengan tendencia a ser grasos, podrá suavizarlo y darlos más volumen”.

Mantener el cabello bien hidratado

“Si de por sí durante todo el año debemos tener muy en mente el uso de acondicionadores y mascarillas, más aún en verano”, recalca la doctora. El calor puede abrir la cutícula del pelo, por lo que mantener una buena hidratación ayudará a que se selle.

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Lo aconsejable es usar mascarillas hidratantes y reparadoras, brumas hidratantes y aceites capilares. Podemos utilizar el aceite al menos dos veces a la semana: realizar un masaje en el cuero cabelludo antes del lavado, o aplicarlo por la noche, y dejarlo actuar mientras se duerme. Después del lavado, hay que alternar unos días brumas o cremas suavizantes y otros días la mascarilla. En el caso del cabello que se enreda con facilidad, sería conveniente recurrir además a productos que no necesitan aclarado.  

Sigue una correcta higiene

En verano sudamos más y, aunque no te des cuenta, nuestro cuero cabelludo también suda. Por esta razón es muy importante lavar el pelo las veces que sea necesario, incluso a diario si vamos a la playa o a la piscina porque conviene eliminar los restos de sal, de cloro y de protector capilar utilizando agua dulce y champú.

Mujer lavándose el pelo 

Al aumentar el ritmo de lavados, en verano es aconsejable utilizar un champú más suave de uso frecuente o elegir uno que sea específico para usar después del sol. Una vez a la semana deberíamos de aplicar el champú habitual que usamos el resto del año  y que se adapta a las necesidades personales que requieren nuestro pelo y nuestro cuero cabelludo. 

Secar el pelo al aire

En verano también es conveniente evitar el uso de secadores, planchas o similares, así que lo mejor es recurrir a secar el pelo al aire de la forma más natural. “Además, debemos evitar el pelo recogido en moños o trenzas, lo que hará que no se seque de forma adecuada, se quede húmedo y pueda romperse con una mayor facilidad”, comenta la Doctora María Eugenia Segovia. 

¿Cómo lavar el pelo en verano?

Ya hemos visto como el calor, el sol y otras agresiones externas pueden dañar el cabello y cuero cabelludo. Tener una correcta rutina de lavado es vital para proteger y reparar nuestro pelo ante estas agresiones. El doctor Javier Pedraz, director médico de la clínica Insparya de Madrid, nos da diez claves para que conseguir hacer el lavado del cabello más eficaz: 

1) Usar el champú indicado para tu tipo de cabello. Puede parecer una obviedad, pero es importante saber cuáles son las necesidades del cabello y adecuar el tratamiento a estas. Te recordamos cómo saber cual es tu tipo de pelo y cómo cuidarlo correctamente. No es lo mismo usar un champú de uso regular como uno de tratamiento de alguna sintomatología como caspa, grasa, irritación o caída. 

Gama de champús especializados para diferentes tipos de cabello 

2) Huir de los componentes químicos. Es conveniente utilizar champús con ingredientes naturales que dañan menos el cabello, sobre todo si tienes un pelo débil o castigado. 

3) Eliminar bien el cloro y la sal. Ya lo hemos aprendido, el agua de la piscina o el agua del mar pueden dejar residuos que es necesario retirar del pelo. 

4) Evitar irse a dormir con el pelo húmedo. Aunque ya hemos visto que es mejor dejar secar el pelo al aire, es importante irse a la cama con el pelo seco ya que la humedad puede favorecer la aparición de hongos que acaben derivando en caspa. 

5) Aclarar bien el pelo. Muchas veces prestamos atención al momento de enjabonarlo pero nos despreocupamos a la hora de enjuagarlo. Es importante eliminar bien cualquier resto de champú del cabello por eso hay que aclarar con insistencia. 

6) Lavarlo a diario. En verano, el cuero cabelludo y el pelo están más expuestos a la suciedad, al sudor y a la contaminación, por lo que es necesario lavar el cabello a diario.

En verano es recomendable lavar el pelo a diario

7) Usar movimientos circulares. Hay que tener en cuenta que no es necesario frotar en exceso el cuero cabelludo. Con un suave masaje con las yemas de los dedos es suficiente. Es importante no usar las uñas, ya que nos podemos arañar el cuero cabelludo e incluso arrancar cabellos. El masaje debe durar unos 2 minutos. 

8) Dejar el champú cinco minutos. Para que sus ingredientes y propiedades puedan ser absorbidas. 

9) Evitar usar agua caliente. El agua caliente abre los poros y puede dañar al cabello. Es importante que el pelo se lave con agua tibia, de esta forma, los poros permanecerán cerrados, y además, el cabello tendrá más brillo. 

10) Elige champús con ingredientes que nutran y protejan el cabello. Como por ejemplo el aloe vera, que equilibra el sebo manteniendo la hidratación, o el extracto de algas marinas que aporta vitaminas y oligoelementos como el yodo o el magnesio. 

Siguiendo todos estos consejos dados por los especialistas conseguirás cuidar tu cabello en verano y protegerlo para que sobreviva a esta temporada y termine mejor de lo que empezó.

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