Muchos fueron los que hace unas semanas, cuando se anunció el estreno de la serie documental 'Los Borbones: una familia real', vaticinaron que daría mucho de qué hablar. Y así está siendo. Tras tres entregas que no han dejado indiferente, hace unas horas, la producción estrenaba su cuarto capítulo. Un capítulo centrado en la figura de la reina Letizia y su complicada y dura llegada a la familia real.
El pasado domingo 12 de junio, Atresmedia Premium estrenaba esta entrega, convertida en una de las más esperadas. Y es que, 18 años después de casarse con el por entonces príncipe Felipe, desvelan los obstáculos y dificultades a los que tuvo que hacer frente Letizia Ortiz hasta llegar a ser Reina.
Unas dificultades que, según desvela esta serie, creada por Ana Pastor y Aitor Gabilondo, responsable de importantes producciones como 'Patria', tuvieron un personaje clave: el rey Juan Carlos.
La oposición del rey Juan Carlos a la relación de Felipe y Letizia
“Juan Carlos I no soporta a Letizia”. Así de contundente se muestra el documental que cuenta cómo Felipe VI se enfrentó a todos, incluido su padre, para poder seguir adelante con su relación con Letizia.
Tal y como desvela ‘Los Borbones: una familia real’, fue la reina Sofía quién detectó el interés que tenía su hijo Felipe por Letizia Ortiz. “Cada día, a la hora de comer, él se levantaba de la mesa y decía ‘Me voy a ver el Telediario’. Parece ser que la reina, que tiene mucha complicidad con su hijo y él la adora, le preguntó” relata Carmen Enríquez, periodista experta en Casa Real.
“Él decía qué mona es, ¿verdad?, qué bien lo hace, tiene clase esta mujer. La iba elogiando poco a poco y entonces su madre se dio cuenta de que se había enamorado de la locutora", apunta Pilar Urbano, periodista y biógrafa de la reina Sofía.
Poco después, en noviembre de 2003, Felipe y Letizia comparecían ante los medios para confirmar su compromiso. ”Me da muchísima alegría poder manifestar lo feliz que me hace nuestro compromiso y lo enamorado que estoy de Letizia” aseguró el príncipe, ante lo que ella añadió: “Entiendo la sorpresa que ha causado esta decisión a casi todos, pero es una decisión madura, fruto de reflexiones muy intensas y sobre todo con el peso y la solidez del profundo amor que nos tenemos y del proyecto en común que iniciamos”.
El mayo de 2004, los príncipes Felipe y Letizia se casaban en la catedral de la Almudena de Madrid. Pero llegar hasta ese día, no fue fácil.
Según cuentan el rey emérito se opuso tajantemente a que su hijo se casara con alguien que no era de sangre real: “Cuando Felipe asegura que se casa con Letizia por encima de todo, al rey Juan Carlos no le gustó porque le parecía que eso era rebajar un poco el nivel de una familia real” apunta Carmen Enríquez.
En la serie, el periodista Fernando Ónega desvela algunos detalles que molestaban a Juan Carlos I: “En un mundo de una etiqueta real, regia, a ella le gustaba salir a la calle con los pantalones vaqueros rotos. Y el rey de España, ver que su nuera sale a la calle con una vestimenta así, le chocó violentamente”.
Y si inicialmente la aparición de la ahora reina Letizia en la familia real no gustó, menos cuando se empezaron a conocer detalles de su pasado, como que estaba divorciada, que era nieta de un taxista e hija de una enfermera. Así lo comentan en el capítulo de Los Borbones, una familia real, donde desvelan que para el rey Juan Carlos, Letizia era “un problema”.
El mote que los amigos del príncipe Felipe pusieron a Letizia
Pero Letizia no solo encontró rechazo por parte del padre de su pareja, también el círculo de amigos íntimos del príncipe cuestionó la elección de Felipe. “Sus amigos eran muy pijos antes de conocer a Letizia. Eran chicos de la alta sociedad, sus amigos del colegio eran de las grandes familias. Letizia tenía la costumbre de decir con cierta frecuencia ‘jolines’ y nos contaron gente próxima a los amigos del príncipe que la llamaban ‘la jolines’” apunta Carmen Enríquez que señala, “es un apodo bastante peyorativo e injusto”.
Darksith1977
Lástima que no hayan entrevistado en profundidad a Peñafiel sobre el tema... hubiera sido menos hagiográfico y más biográfico.