Si hace solo unos días os dábamos en exclusiva desde GRITOS lo que nos costaría a los españoles darle de comer a nuestros reyes cuando viajen en avión, ahora nuestro Rey ha querido quitarle hierro al asunto, comiendo como un español más, en un bar de carretera. Felipe VI y el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, regresaban a Madrid tras haber entregado en el monasterio de Yuste, en Cáceres, el premio Carlos V a la profesora Sofia Corradi.
Se llama Puerta de Extremadura y está ubicado en el kilómetro 161 de la Nacional V, perteneciente al municipio de Calzada de la Oropesa (Toledo). Eran poco más de las tres de la tarde, una hora más que adecuada para tomar algo y hacer un descanso. Según explicó el encargado del local José Antonio Pulido a ABC, el Rey comió patatas con conejo, ensalada, carne, bizcocho y un plátano, todo por unos once euros.
Ese día también se ofrecía lengua de vaca, ternera y sopa castellana, que es lo que tomó el ministro.
Han sido precisamente un par de esas fotos las que ha mostrado el encargado del local. Siempre cercano y natural, don Felipe se fotografió con el encargado y algunos miembros del personal de cocina. Y es que dar de comer a un Rey es algo que no pasa todos los días.
