La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha cumplido con las expectativas de los mercados y mantiene estable los tipos de interés situados entre el 0% y el 0,25%. La institución al cargo de Ben Bernanke afirma que la economía estadounidense “se ha expandido moderadamente”. Un buen comportamiento que contará con el favor de la política monetaria: el organismo ha anunciado que el precio del billete verde se mantendrá al menos hasta finales de 2014.
A juicio de la Fed, la flexibilidad monetaria favorecerá que el país continúe por la senda virtuosa de la recuperación. EE UU parece ver luz al final del túnel y el panorama planteado parece halagüeño: “las condiciones del mercado laboral han mejorado y el desempleo ha disminuido notablemente en los últimos meses”, subrayó la entidad en un comunicado.
Operación twist
Sin sorpresas. La entidad dirigida por Ben Bernanke ha cumplido con el guion y ha mantenido los tipos como auguraban los expertos. Pero los mercados continúan expectantes “de cualquier señal que sugiera una nueva operación twist”, apuntan fuentes del sector. Esto es, los inversores siguen atentos a cualquier novedad que provenga del otro lado del charco en cuanto a una posible operación de inyección de liquidez esterilizada.
¿Pero qué significa la operación twist? Este tipo de acción de política monetaria de nombre tan peculiar implica canjear bonos a corto plazo por títulos a largo plazo, explicaron las mismas fuentes. Así, la institución efectuaría una operación de liquidez esterilizada. O lo que es lo mismo, disminuir la rentabilidad de la deuda estadounidense. De este modo, la Fed lograría estimular que los mercados buscaran sacar mejor provecho a su dinero en otros activos. También se lograría mejorar el flujo de crédito sin que la institución tuviera que recurrir a la máquina de imprimir papel.
Consecuencias para España
¿Qué pasaría si finalmente la Fed no recurriera a este tipo de acciones? “Las consecuencias para España serían limitadas”, admiten fuentes del sector. Pero el consumidor sí podría acabar notándolo en su bolsillo por facturas de gasolina y gasóleo más caras. Si finalmente la institución al mando de Bernanke no efectúa una operación twist podría producirse una apreciación del dólar. A partir de ahí, la regla de tres sería sencilla: el crudo -que se vende y se compra mayoritariamente en dólares- acabaría resultando más caro. Conclusión: el precio de la gasolina, que viene registrando máximos históricos en las últimas semanas, podría incrementarse aún más.