La deuda pública española en relación al PIB aumentó 32 puntos en la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero. Al cierre de 2007, la deuda emitida suponía un 36,2% del PIB, muy por debajo de los niveles máximos permitidos por la UE (del 60%). Al cierre de 2011, un año gestionado en su mayoría por el Gobierno socialista, la deuda pública ya era del 68,5% del PIB.
Este aumento supone un 14,2% más que el año anterior, y se trata del nivel más alto de endeudamiento de España desde que el Partido Popular entrara en el Gobierno en el año 1996. Cuando el PSOE de Felipe González dejó el poder, la ratio deuda/PIB era del 67,4%. A ello le siguieron unos años de reducción de la deuda, que tocó suelo en 2007 con apenas el 36,2% del PIB en deuda emitida.
Desde entonces ha venido un súbito incremento, impulsado por la necesidad de financiación de las administraciones por la crisis, que ha hecho que en tan sólo cuatro años se haya recuperado el nivel de endudamiento del 96, o todo lo que se había reducido en más de una década.
Las autonomías suben un 17,3% su deuda
Las administraciones públicas alcanzaron un máximo de endeudamiento en relación al PIB en 2011, con el 68,5%. Lo hicieron tras un importante aumento en las administraciones central y autonómica, no así en los ayuntamientos que se contuvieron mucho más. La deuda autonómica subió un 17,3% en 2011 hasta alcanzar los 140.083 millones de euros o el 13,1% del PIB. Cataluña, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha son las autonomías más endeudadas.
Pero mucho más aumentó la deuda estatal (con las ya famosas emisiones del Tesoro), que creció un 14,6% hasta los 559.459 millones. Más de la mitad del endeudamiento público corresponde al Estado. Según los datos del Banco de España hechos públicos este viernes, la deuda de los ayuntamientos ha permanecido prácticamente invariable, tras caer un 0,03% hasta 35.420 millones y quedar en el 3,3% del PIB.